En menos de un mes la enfermedad se ha cobrado tres víctimas y cada día que pasa el Ministerio de Sanidad del país europeo confirma nuevos casos y no descarta que el número aumente durante los próximos días
Más de 170 afectados, 550 casos bajo sospecha por el consumo de carne en mal estado es el saldo que ha dejado, hasta el momento, el que se considera el peor brote de listeriosis en la historia de España.
Este problema de salud pública es causado por una microscópica y resistente bacteria, Listeria monocytogenes, presente en un lote de carne mechada elaborada por una empresa de la sureña región de Andalucía, bajo la marca ‘La Mechá’.
En menos de un mes, la listeriosis se ha cobrado tres víctimas: una mujer embarazada perdió a su bebe en los últimos meses de gestación tras el consumo de la carne contaminada, una mujer de 90 años falleció en Sevilla y también se conoció del fallecimiento de un hombre de 62 años en Cantabria.
Cada día que pasa, el Ministerio de Sanidad de España confirma nuevos casos y no descarta que el número aumente en los próximos días.
Aunque el brote de listeriosis tiene su epicentro en Andalucía, se han reportado casos en otros puntos como Madrid, Asurias, Gijón, Aragón, Cantabria, Cataluña, Extremadura y Castilla León, ya que la compañía que comercializa la carne mechada también distribuyó en algunas de estas comunidades el producto, o algunos de los infectados lo consumieron en Sevilla durante las vacaciones de verano.
¿Qué es la listeriosis?
La listeriosis es una infección causada por la bacteria ‘Listeria monocytogenes’, poco frecuente pero grave cuando ocurre y con altas tasas de ingresos y de mortalidad, según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que la mortalidad de la listeriosis es muy alta, uno en cada tres casos es fatal.
Las personas contraen la infección principalmente tras consumir alimentos contaminados por la Listeria -por eso está en el grupo de las enfermedades por transmisión alimentaria con la Salmonela, la Triquina o el Anisakis- aunque el contagio puede ocurrir también a través del contacto con animales o personas infectadas.
La ‘Listeria monocytogenes’ se puede encontrar en muchos alimentos: pescados ahumados, carnes, quesos (especialmente en su variedad blanda) y vegetales crudos.
La bacteria solo causa enfermedad si se digiere viva. Los síntomas pueden variar, desde leve, con un cuadro que se asemeja al de la gripe, náuseas, vómitos y diarrea, hasta infecciones más graves, como meningitis, septicemia y otras complicaciones potencialmente mortales. El periodo de incubación que puede llegar a los 70 días, reseña EFE.
Peligro para las embarazadas
La listeriosis se torna mucho más grave en el caso de las mujeres en estado de gestación, quienes tienen 20 veces más probabilidades de contraer la enfermedad que otros adultos sanos.
Este microorganismo que puede resultar especialmente peligroso para algunos grupos de riesgo, ya que suele afectar fundamentalmente a mujeres embarazadas, recién nacidos, personas mayores y personas con el sistema inmunológico debilitado, que pueden llegar a padecer “infecciones graves del torrente sanguíneo (lo que causa septicemia) o el cerebro (que provoca meningitis o encefalitis)», tal y como explica el Centro para la Prevención y el Control de Enfermedades de la nación europea.
Este padecimiento puede causar aborto espontáneo, muerte fetal, parto prematuro o que el bebé nazca con bajo peso, septicemia o meningitis.
La OMS advierte que las mujeres se suelen infectar en los últimos tres meses de embarazo y pueden no presentar síntomas, más allá de un poco de fiebre.
De hecho, en los últimos 15 días se han registrado más de 25 casos de mujeres embarazadas contagiadas y dos casos de abortos en España.
Sin respuestas
¿Cómo es posible que se haya producido un brote de listeriosis de tal magnitud en un momento en el que los controles de seguridad en la industria alimentaria son más exigentes que nunca?, ¿cómo llegó a venderse carne contaminada? y ¿cuál fue la falla?, son algunas de las interrogantes que tanto las autoridades sanitarias como los expertos investigan y que aún no han podido descifrar.
De hecho, el expresidente del Consejo General de Colegios de Veterinarios de España, Juan José Badiola, advirtió que será realmente difícil conocer dónde y cómo se contaminó el lote de carne mechada que las autoridades señalan como el origen del brote.
La Listeria monocytogenes es, en palabras de algunos expertos, la «gran bestia negra» de la industria alimentaria, ya que resiste condiciones extremas y también se adapta con facilidad a distintos ambientes.
«La listeria es especialmente temida por su ubicuidad, su resistencia y su capacidad para formar biofilms (ecosistemas bacterianos en distintas superficies)», explicó Beatriz Robles, tecnóloga de los alimentos y especialista en seguridad alimentaria.
En declaraciones a El Español, indicó que las causas más habituales de los brotes de listeriosis suelen ser dos: la primera tendría que ver con la posible contaminación de las materias primas (en este caso, la carne mechada) y la imposibilidad de destruir los microorganismos.
La segunda implicaría que los equipos de trabajo (superficies, maquinaria, cuchillos, guantes) estuvieran contaminados y así contaminaran el alimento en alguno de los puntos del proceso.
Uno de los puntos críticos en el proceso de producción de la carne mechada es la fase de horneado. Según la Aecosan, cocinar a temperaturas superiores a 65 grados celsius mata a las bacterias.
«Sin embargo, la listeria puede contaminar los alimentos tras su elaboración. Por ejemplo, la contaminación puede ocurrir después de que los alimentos se cocinen, pero antes de envasarlos», advirtió la agencia.
Por su parte, un reporte del diario ABC indica que el proceso de horneado de la carne mechada se realiza a 83,9 grados celsius, por lo que la contaminación del producto podría haberse producido en una fase posterior.
No obstante, el consejero andaluz de Salud, Jesús Aguirre le declaró a este diario que siguen sin saber cómo la bacteria llegó a la carne.
“Se comprobó que en el proceso de horneado el interior de la carne llega a alcanzar 86 grados y a esa temperatura se destruye toda la listeria. Descartamos, por tanto, que viniera directamente de la carne. La contaminación debió de darse desde que terminó el horneado hasta el envasado”, enfatizó Aguirre.
Mientras, José Miguel Cisneros, portavoz del gabinete técnico creado por el Gobierno español para afrontar la crisis, explicó que «es imprescindible averiguar cómo se produjo la contaminación, porque no es normal, y esto tiene el añadido de la complejidad, necesita tiempo e información contrastada».
Cisneros trató de aliviar la tensión al decir que «lo importante, desde un punto de vista práctico, es que el producto está identificado«.
Alerta ignorada
El mayor brote de listeriosis en la historia de España se produjo -paradójicamente- apenas tres meses después de que un grupo de investigadores del Instituto de Salud Carlos III publicara un detallado estudio en el que contabilizó 5.696 hospitalizaciones entre 1997 y 2015 -una media de 70 muertes anuales- y en el que urgía a las autoridades sanitarias tomar medidas.
«La listeriosis es un problema de salud pública emergente en España que requiere una acción dirigida. Se necesitan urgentemente estrategias de prevención adicionales, incluyendo educación en seguridad alimentaria y avisos para todos los grupos de riesgo», indicó el informe.
Acciones tardías
La Junta de Andalucía decretó el pasado 15 de agosto la alerta sanitaria y la ministra de Sanidad en funciones, María Luisa Carcedo, confirmó este martes que la medida se había extendido a nivel nacional desde el día 16, poco antes de que se conociera el primer fallecimiento por el brote.
En rueda de prensa, Carcedo informó que la alerta se comunicó a todas las comunidades autónomas para que localizaran el producto y se retirara, y a la red de alerta sanitaria de vigilancia epidemiológica para identificar los casos que afectan a la salud humana.
La producción de la empresa que fabrica la carne mecha se detuvo el pasado 15 de agosto y se retiraron del mercado todos los paquetes del producto, así como del resto de alimentos que distribuye en el mercado español, entre los que figuran manteca ibérica, chicharrón andaluz, lomo al jerez y lomo al pimentón.
Sin embargo, especialistas y medios de comunicación españoles han denunciado que las acciones se tomaron de forma tardía.
Desde el primer análisis de laboratorio, que se efectuó el 8 de agosto, y hasta que se confirmó qué carne era la contaminada de listeria, pasaron seis días. El consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, reconoció que hubo un desfase de «dos o tres días» en la detección de la carne contaminada.
«Sabíamos que algo estaba pasando a principios de agosto porque hubo un repunte de casos, pero hasta que no se produjo el primer brote familiar, la encuesta epidemiológica no nos llevó hasta dos o tres productos. El día 14 se confirmó que el origen estaba en La Mechá y se inmovilizó la partida de la carne”, declaró al portal Cope.
Por su parte, la ministra Carcedo, aceptó que «evidentemente se ha producido un fallo, porque los procedimientos están pensados para que no suceda esto y haya una garantía de protección de los consumidores».
Alerta internacional
El Ministerio de Sanidad de España lanzó una alerta internacional por el brote de listeriosis.
El despacho indicó que, dado que el periodo de incubación de la enfermedad es largo y la distribución de la carne mechada es amplia, no se puede descartar la aparición de nuevos casos, incluso en personas residentes en otros países que hayan podido consumir el producto durante su estancia en la nación ibérica.
«Desde el Ministerio, la responsabilidad que tenemos no es sólo con las Comunidades Autónomas, sino también a nivel de la Comisión Europea y a nivel de la Organización Mundial de la Salud. Ya nos hemos puesto en contacto, comunicando este brote desde el punto de vista epidemiológico para que se siga la vigilancia, por si existe algún turista que viva en otro país diferente», declaró la Ministra.
«Somos un estado miembro de la OMS y de la Unión Europea, por eso se lanza una alerta. Es probable que algún turista haya podido ingerir esta carne en Andalucía y también que se la haya podido llevar. Por eso hemos alertado. Y también por la contabilidad de casos», explicó.
Por su parte, la Comisión Europea (CE) indicó que está al corriente del brote en relación con el consumo de carne. “Estamos en estrecho contacto con las autoridades españolas y seguimos la evolución de la situación», informó la portavoz.
Según la Aecosan, en 2017 hubo 2.480 casos de listeriosis en la Unión Europea, con 227 muertes en 16 Estados miembros, lo que implica una tasa de mortalidad del 13,8 %.
El pasado mes de abril en Francia, las autoridades ordenaron también la retirada de quesos. Este contagio de listeria causó dos muertes en el país vecino de España: una mujer de 64 años y un bebé que aún no había nacido, todo por el consumo de este queso por la embarazada.
Hace tan sólo dos meses, en Reino Unido seis personas enfermaron por comer sándwiches de pollo infectados de listeria. Tres de ellas, desgraciadamente, fallecieron.