El Ministerio británico de Relaciones Exteriores informó este lunes que entregó al Gobierno de Rusia sus conclusiones sobre el siniestro del Airbus A321 ocurrido el pasado 31 de octubre en la provincia del Sinaí, en territorio egipcio.
De acuerdo con el reporte de RIA Novosti las afirmaciones de la parte británica tiene como base datos de sus servicios de inteligencia.
«Hay una probabilidad alta de que el avión de pasajeros ruso se estrellara a causa de un artefacto explosivo. Hemos proporcionado las conclusiones a nuestros socios, entre ellos Rusia. Parte de esa información es confidencial, pero vamos a compartir lo que podemos», informó el servicio de prensa de la cancillería de Londres.
Restricciones
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó el domingo un decreto en el cual se prohíbe de forma temporal los vuelos desde territorio ruso hacia Egipto; mientras avanzan las investigaciones sobre el accidente, que dejó 224 muertos.
En contexto
Los 217 pasajeros y siete tripulantes que transportaba la aeronave, fallecieron en el accidente aéreo.
De acuerdo a declaraciones de Hossam al-Qawish, representante del Gobierno egipcio, el siniestro se atribuye a un fallo técnico.
Sin embargo, el grupo terrorista autodenominado Estado Islámico insiste en que son responsables del ataque. Por su parte el Kremlin asegura que todas las afirmaciones previas a la versión oficial son especulaciones.