Los indicios de que los incendios en Grecia fueron provocados, se incrementó luego de fueran encontrados artefactos incendiarios y rastros de gasolina.
Una de las pruebas fue hallada en la casa de una abuela, quien luego de ser rescatada de la playa, regresó a su casa y encontró tirada en la puerta de su casa una botella de Coca-Cola con una sustancia oscura en su interior.
Según explica el diario La Vanguardia, la mujer regresó a su casa y dio aviso a las autoridades, puesto que su vivienda no fue arrasada por las llamas y se encontraba intacta, -pero con la botella en su entrada- ubicada en la pequeña isla de Mikonou.
La adulta mayor dio aviso a la policía y al llegar al sitio, confirmaron que el líquido en el interior de su vivienda era gasolina, explicó el enviado especial del diario español.
El descubrimiento confirma, en parte, la hipótesis de los organismos de seguridad, que estiman que las llamas pudieron ser provocadas en tres lugares distintos de manera simultánea.
El ministro de Protección Civil, Nikos Toskas, informó que los incendios fueron iniciados por manos criminales. Un fiscal de Atenas examina tanto las posibles causas del horrendo siniestro, como la forma en que fue combatido.
El Gobierno de Alexis Tsipras anunció que concederá 10.000 euros y un empleo en el sector público a las esposas y parientes cercanos de las víctimas.
El fuego de grandes proporciones del día miércoles, provocó la muerte de más de 80 personas y cientos de heridos; muchos de ellos graves, luego que las llamas se expandieran rápidamente por varios sectores turísticos cercanos a la capital griega.