El exmilitar boliviano Gary Prado Salmón, responsable de atrapar al guerrillero argentino Ernesto Che Guevara en 1967, dio nuevamente su versión de los hechos. De acuerdo a su mirada, el líder revolucionario fue enviado a morir a Bolivia.
«Después de tantos años, lo que se ha desentrañado es que finalmente al Che lo mandaron a morir aquí», aseguró en la entrevista para la agencia Efe. Repitiendo una teoría ampliamente difundida, sostuvo que «se libraron de él, esa es la realidad». Fidel Castro no tenía necesariamente esa intención, pero «la cúpula del Partido Comunista Cubano ya no lo toleraba por su carácter y su forma de ser impulsiva», agregó Prado.
Las frases del exmilitar se inscriben en la presentación de la cuarta edición de su libro ‘La Guerrilla Inmolada’, donde cuenta su experiencia de lucha contra el grupo comandado por Guevara. La publicación salió a la luz por primera vez en 1987, a 20 años del asesinato del líder guerrillero. En el prólogo para esta nueva edición, Prado sostiene la teoría de que el argentino fue deliberadamente enviado a la muerte.
Sin embargo, su planteo no es nuevo y a lo largo de la historia se ha intentado instalar esta teoría negada por los familiares de Guevara y el propio Gobierno cubano.
¿Qué sucedió con el Che en Bolivia?
A diferencia de las versiones difundidas por sus enemigos, que trataron de generar una ruptura entre Guevara y Fidel Castro, las propias palabras del guerrillero eliminan cualquier duda al respecto. En su famoso ‘Diario del Che en Bolivia’, encontrado por los propios militares bolivianos y publicado en varios idiomas, da cuenta del respaldo que tuvo por parte de Cuba en su incursión guerrillera.
Allí relata su intercambio epistolar con Fidel y cómo había cubanos, designados especialmente por el Gobierno de La Habana, para acompañarlo en su grupo armado. Estos estuvieron con él hasta el final de sus días.
También cabe recordar su famoso ‘Mensaje a los pueblos del mundo a través de la Tricontinental’, donde afirmó la necesidad de «crear dos, tres… muchos Vietnam». Allí hacía referencia a la importancia de generar focos guerrilleros en distintas partes del mundo. En ese sentido, su viaje a Bolivia ―luego de una experiencia similar en el Congo― se inscribía en su estrategia militar y su decisión personal de abandonar Cuba.