El Centro de Investigaciones Sísmicas de la Universidad West Indies (UWI SRC, por su sigla en inglés) informó que este viernes ocurrió una nueva explosión en el volcán La Soufriere, en San Vicente y las Granadinas, a las 06H15 hora local.
La explosión, que ocurrió tras unas 40 horas de relativa tranquilidad en el cono, provocó una columna de erupción con altura estimada de 8.000 metros, así como una nube de cenizas que se está moviendo hacia el oeste de la nación caribeña.
De acuerdo con el UWI SRC, las primeras mediciones exitosas del flujo de dióxido de azufre (SO2) en La Soufriere se tomaron en la extensión de la costa oeste y arrojaron un flujo promedio de 809 toneladas diarias.
Como indica el referido instituto, el SO2 evidencia que hay desgasificación de magma fresco de una fuente más profunda, por lo que la erupción prosigue.
Una constante de terremotos híbridos y de largo período caracterizó la actividad sísmica del volcán, que está en el nivel de alerta rojo. Su emisión de cenizas afecta a San Vicente y las Granadinas, pero también podría impactar las islas vecinas.
Recientemente, el coordinador de la Organización de Naciones Unidas para Barbados y el Caribe Oriental, Didier Trebucq, alertó que la erupción de La Soufriere abre la posibilidad de una crisis humanitaria en este territorio del Caribe y las islas próximas.
“Esta crisis puede durar más de seis meses», destacó Trebucq en rueda de prensa virtual sobre la erupción del coloso, en constante actividad desde el viernes pasado.
De acuerdo con el funcionario, el sistema de abastecimiento de agua en San Vicente está totalmente paralizado y la población depende de los víveres que llegan en barco desde territorios vecinos.
Por su parte, el primer ministro, Ralph Gonsalves, dijo a medios internacionales que el país tenía más cenizas que agua potable.
«Yo viví aquí la erupción de 1979 y esta es mucho peor. Es comparable a la de 1902», apuntó en alusión a aquella tragedia que dejó más de 1.000 víctimas mortales.
Hasta el momento no se han reportado fallecidos, pero sí miles de evacuados y las pérdidas materiales son millonarias. Pese al control de la COVID-19 que existía en el país, este desastre natural que ya se extiende por siete días ha provocado el aumento de casos por las personas reunidas por la evacuación.
La Soufriére estalló el viernes 9 de abril tras haber permanecido inactivo durante 40 años. El país está expuesto a columnas de humo, cenizas y vapor a siete días de la primera erupción.
Fuente: Telesur