La República Democrática del Congo (RDC) seguirá su lucha contra el Ébola gracias a la asignación de 40 millones de dólares por parte de la Organización de Naciones Unidas (ONU), así lo informó el subsecretario general para Asuntos Humanitarios, del organismo, Mark Lowcock.
Los recursos provienen del Fondo Central de Respuesta a Emergencias (CERF, por sus siglas en inglés) para prestar ayuda a la RDC en su lucha contra un nuevo brote de ébola.
El servicio de prensa del organismo señaló que los funcionarios catalogaron la situación como crítica. El Gobierno de la RDC confirmó el nuevo brote en la ciudad de Mbandaka, ubicada en el noroeste de la república.
Se esperaba que la RDC declarase la victoria sobre el virus del Ébola el 13 de abril, pero el 10 de abril -52 días después de la recuperación del último enfermo- se registró un nuevo caso de contagio.
La enfermedad causada por el virus del Ébola es una infección aguda que afecta a las personas y a algunas especies animales. La epidemia del ébola apareció por primera vez en 1976 en dos brotes simultáneos ocurridos en Nzara (hoy Sudán del Sur) y Yambuku (República Democrática del Congo). Sobrevino hace unos años (2014-2016) en África Occidental y se extendió principalmente a tres países: Guinea, Sierra Leone y Liberia.
El reciente brote del ébola en la República Democrática del Congo se produjo en julio de 2018, un año después la OMS calificó ese brote como emergencia a escala global.
El periodo de incubación (intervalo desde la infección hasta la aparición de los síntomas) oscila entre 2 y 21 días. Las personas no son contagiosas hasta que aparecen los síntomas. Se caracterizan por la aparición súbita de fiebre, debilidad intensa y dolores musculares, de cabeza y de garganta, lo cual va seguido de vómitos, diarrea, erupciones cutáneas, disfunción renal y hepática y, en algunos casos, hemorragias internas y externas.
Con información de Sputnik y la OMS
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