Boicot de Catar ante bloqueo de Arabia Saudita y sus aliados

Catar a través de su Ministerio de Economía y Comercio ha prohibido la comercialización de productos fabricados por el cuarteto conformado por Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin y Egipto, esto como respuesta a los embargos realizados desde junio del año pasado contra el pequeño emirato del Golfo Pérsico.

Alianza rompe relaciones con Catar

Los cuatro estados que conforman la alianza rompieron las relaciones diplomáticas con Catar en junio del año pasado, mediante acciones que estuvieron dirigidas por el Gobierno saudí. En este sentido los cuatro países hacen responsable a Doha (capital de Catar) de contribuir con las practicas terroristas y desestabilizar el suroeste de Asia, a lo que desde el gobierno catarí se responde con una contundente negación de los hechos.

En atención a los acontecimientos anteriores se pudo conocer, que los cuatro países de la alianza habrían presentado un conjunto de exigencias donde instaba a Catar a seguirlas o asumir las consecuencias.

Dentro de las exigencias estaban contempladas la cerrar el canal satelital Al Jazeera, echar a las tropas turcas desplegadas dentro del territorio catarí, minimizar sus relaciones con la República Islámica de Irán y romper los vínculos con el movimiento egipcio de Hermanos Musulmanes.

Catar no obedece a presiones

fuente: el confidencial

Como consecuencia de la negativa a aceptar presioness se dio la ruptura de relaciones y con ella, el advenimiento de sanciones por parte del cuarteto al emirato, dentro de las que se destacan la prohibición de las aerolíneas cataríes a sobrevolar el espacio aéreo de los cuatro países. En este sentido Arabia Saudí cerró completamente la frontera terrestre con la península catarí. Acotando también que algunos países africanos escindieron lazos con Catar solidarizándose con Arabia Saudí.

Mas sin embargo la pequeña península catarí hizo caso omiso de las imposiciones por parte de los países aliados calificándolas de disparatadas, denunciando la violación a su soberanía, con lo que desató un conjunto de amenazas y sanciones adicionales por parte de los países liderados por Riad (capital y principal centro de negocios de Arabia Saudí).

Producto de este acoso por parte del enemigo de Catar se han robustecido los vínculos con Irán y Turquía, abriendo estos su espacio aéreo a Doha, facilitando rutas comerciales para el suministro de alimentos y demás productos requeridos por la población de Catar tratando de evitar la  escases que afecte a la población.

Finalizando, no se puede ignorar el hecho de que el boicot se inicia justamente cuando se ha develado la vinculación de EEUU con mediadores opuestos a Catar, pero ampliamente beneficiarios de los negocios de los príncipes herederos de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos