La venta de órganos puede ser uno de los negocios más rentables para el Estado Islámico. Según la agencia de información AINA, la rama iraquí del Estado Islámico vende los órganos de sus soldados fallecidos en el mercado de trasplantes.
El diario iraquí «Al Hayat» señaló que las cirugías se realizan en un hospital en la ciudad de Mosul, tomada por el EI en junio, y que se trasladan los órganos humanos mediante traficantes con conexiones explícitas al mercado negro de trasplantes, escribió RT.
Siruwan al Mosuli, médico de la segunda ciudad más grande de Iraq, señaló al diario local que el grupo armado utilizan los hospitales y clínicas regulares para realizar las cirugías.
“Los cadáveres de los combatientes son llevados a los servicios médicos para que se les extraigan los órganos, que posteriormente estarán listos para la comercialización”, dijo al Mosuli al periódico.
Según AINA, los habitantes de Mosul inicialmente sospecharon las actividades ilegales que se llevan a cabo en los hospitales que ahora han sido confirmados por el médico iraquí. El médico al Mosuli señaló que los doctores que operan los yihadistas no son iraquíes, pero que el EI contrata a cirujanos de Arabia Saudita.
Sin embargo, los reportes de territorios bajo el control del EI son difíciles de obtener y verificar. A fines de noviembre el EI anunció que las redes de telefonía móvil habían sido bloqueados en la ciudad. El objetivo era detener la circulación de información sobre las posiciones del grupo yihadista que podrían ser de utilidad para la coalición internacional que lucha contra el EI. Además, varios trabajadores de medios de información locales fueron secuestrados en el mes de noviembre.
La venta de petróleo permite al EI mantener finanzas estables, la fuente de noticias AINA cita cifras presentadas en septiembre en las cuales se estiman los ingresos en aproximadamente 3 millones de dólares al día. Según el diario Al Hayat, las líneas de comercio de los combustibles pasan por Kurdistán y Turquía.
Se estima que el Estado Islámico ha ganado entre 35 y 45 millones de dólares en pagos de rescate en el último año.
Sandra Segall
El Ciudadano