Julian Assange espera la resolución de un tribunal inglés este 6 de febrero para saber si podrá abandonar la Embajada Ecuatoriana tras casi seis años de encierro. Esto luego que un informe médico difundido por el periódico The Guardian, afirmara que la salud de Assange se encuentra en riesgo debido al encierro en Londres. El fundador de Wikileaks fue examinado por tres médicos durante octubre de 2017.
El informe emitido por los doctores afirma lo siguiente: «La opinión del grupo de trabajo es que la Embajada no está equipada para una detención prolongada y carece del equipo o las instalaciones médicas necesarias para proporcionar un ambiente razonable para el Sr. Assange, determinación con la que estamos de acuerdo».
Declararon además una particular preocupación sobre las presiones psicológicas ante la incertidumbre que genera un encierro indefinido, que según ellos son más profundas de las «esperadas en un encarcelamiento». El equipo médico sostiene que esta situación representa una «clara violación de su derecho humano a cuidado de la salud».
En 2015 el gobierno británico ya rechazó una petición para llevar a Assange al hospital, por lo que la situación no se ve favorable para el hacker. Además se ha descartado el ingreso de un equipo con todos los implementos necesarios para sus tratamientos, por la dificultad que acarrea.
El presidente de Ecuador,Lenín Moreno mantuvo conversaciones con la embajadora de Reino Unido en ese país,Catherine Ward , durante las cuales buscaban encontrar una solución al problema “para que al mismo tiempo el señor Assange proteja su vida y pueda ser sancionado por el error que cometió”, expresó Moreno.