Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y Mongolia, Ukhnaagiin Khurelsukh, asistieron este martes 3 de septiembre a una recepción oficial para conmemorar el 85º aniversario de la victoria conjunta de las fuerzas armadas soviéticas y mongolas sobre los militares japoneses en el río Khalkhin Gol.
«Rendimos homenaje a los soldados soviéticos y mongoles que lucharon en esas intensas y sangrientas batallas. Su hazaña será recordada por siempre por nuestras naciones y quedará grabada en la historia de Rusia y Mongolia. El coraje y la fortaleza de los héroes de Jaljin Gol detuvieron a un enemigo peligroso que tramaba planes de largo alcance para ocupar toda Mongolia», dijo Putin en su discurso.
El Mandatario ruso agregó que esa victoria influyó enormemente en los destinos de la región y en todo el curso de la Segunda Guerra Mundial.
«Después de sufrir la derrota, Japón se abstuvo de atacar a la Unión Soviética y nuestro país pudo desplegar todas sus fuerzas, incluidas las divisiones de refresco del Lejano Oriente, contra la Alemania nazi. Por supuesto, recordamos el importante apoyo que nos brindó la nación mongola durante la Segunda Guerra Mundial, durante la Gran Guerra Patria. Mongolia ayudó al frente suministrando alimentos y ropa de abrigo y también recaudó fondos para la fabricación de tanques y aviones», mencionó Putin.
El jefe de Estado ruso destacó que, fieles a las tradiciones de hermandad militar, Rusia y Mongolia continúan colaborando activamente y desarrollando su asociación estratégica integral.
«Rusia siempre ha tenido como objetivo fortalecer las relaciones amistosas con Mongolia y lo ha considerado y sigue considerando como una de sus prioridades en política exterior. A su vez, apreciamos el hecho de que Mongolia también se orienta hacia una cooperación mutuamente beneficiosa con nosotros. Nuestras conversaciones actuales con el presidente Ukhnaagiin Khurelsukh y otros líderes mongoles lo han confirmado claramente. Todas las reuniones se desarrollaron en un ambiente tradicionalmente constructivo y sustancial y permitieron revisar una amplia gama de cuestiones y problemas regionales e internacionales de actualidad y trazar perspectivas futuras de nuestra diversa asociación», detalló el Presidente ruso.
En este sentido, resaltó que plantearán y abordarán los objetivos más ambiciosos. «Ampliaremos activamente nuestra colaboración en los sectores tradicionales, iniciaremos la cooperación en nuevos ámbitos de alta tecnología y trabajaremos codo con codo para fortalecer toda la gama de nuestra asociación bilateral en beneficio de los pueblos de Rusia y Mongolia», afirmó Putin.
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