Desde el Kremlin reiteraron que Moscú no entrará en ese camino porque logró importantes avances en lo referente a la superioridad tecnológica
Rusia se mantiene atenta a las políticas de Estados Unidos que están relacionadas con el desarrollo de nuevas armas, tras el retiro de Washington del tratado de eliminación de misiles de corto y medio alcance (INF) el pasado 2 de agosto.
«Seguimos muy de cerca las acciones que emprende Washington con relación al desarrollo de nuevos sistemas de armas», declaró este martes el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov.
Asimismo, agregó que los trabajos de investigación científica para crear misiles de alcance medio en violación del Tratado INF «causaron la destrucción de ese documento muy importante desde el punto de vista de la seguridad internacional».
Ese pacto que abandonó la administración de Donald Trump lo firmaron, el 7 de diciembre de 1987, el presidente de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, y su homólogo norteamericano, Ronald Reagan, para ayudar a poner fin a la Guerra Fría y prohibió todos los misiles nucleares y no nucleares de corto y mediano alcance.
En este sentido, el portavoz de Moscú advirtió que desde su país temen una nueva espiral de la carrera armamentista.
«Quiero recordar las palabras del presidente ruso, Vladímir Putin, que Rusia no entrará en esta carrera armamentista potencial porque logró importantes avances en lo referente a la superioridad tecnológica para garantizar la seguridad y mantener la paridad», aclaró.
Estas declaraciones se producen después de que, este lunes, el mandatario estadounidense asegurara que están en desarrollo unas nuevas «armas tremendas».
«Tenemos armas que nadie puede siquiera creer. Vamos a hacer algunas paradas durante las próximas 4 o 5 semanas. Algunas las mostraremos, otras no», dijo Trump.
Fuentes: Sputnik, Actualidad RT, HispanTV.