El número de mujeres embarazadas adictas a los opiáceos se ha cuadruplicado en los últimos 15 años en Estados Unidos, lo que aumenta el número de bebés que enfrentan un nacimiento traumático, revelan las estadísticas del Gobierno norteamericano.
De acuerdo con dato recolectados entre 1999 y 2014, el número de madres adictas a estas drogas que ingresaron a un hospital en trabajo de parto aumentó de 1.5 madres por cada 1.000 partos a 6.5 por cada 1.000.
Sin embargo, al igual que muchos problemas de salud en Estados Unidos, existe una gran variación en las regiones en cuanto al abuso de medicamentos opiáceos.
Si bien la tasa de mujeres adictas a estos fármacos para aliviar el dolor que dieron a luz en Hawai coincide con el promedio nacional, la media es 53 veces más alta en West Virginia.
«Estos hallazgos ilustran el impacto devastador de la epidemia de opiáceos en las familias estadounidense, incluidas las más jóvenes», expresó el doctor Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
«El trastorno de uso de opioides que no es tratado durante el embarazo puede llevar a resultados desgarradores. Cada caso representa una madre, un niño y una familia que necesitan tratamiento y apoyo continuo «, alertó citado por The Guardian.
Bebés con síndrome de abstinencia
El informe realizado por el CDC concuerda con otra investigación que advierte sobre el aumento inquietante de bebés expuestos a drogas y que presentan un síndrome de abstinencia al nacer.
Los niños de madres que fueron adictas a los calmantes durante los meses de la gestación nacen con este síndrome, por la ausencia de opiáceos naturales como la heroína, sintéticos como la metadona o analgésicos recetados por prescripción médica con los que se mezclan o tratan las adicciones.
Los bebés con abstinencia neonatal tiemblan incesablemente, lloran sin parar, presentan cuadros de diarrea severa, estornudos y llantos profundos y repetidos que contorsionan todo el resto de sus cuerpos.
Además, no comen porque rechazan la comida o porque se ahogan con ella; o comen compulsivamente.
Más madres adictas
Entre los estados que presentan mayores incrementos en casos de madres adictas a calmantes se encuentran Maine, Nuevo México, Vermont y West Virginia. mientras que Hawaii y California reflejan una tasa más baja.
«Incluso en los estados con los menores aumentos anuales, cada vez más mujeres presentan un trastorno por consumo de opioides durante el trabajo de parto y el parto«, indicó la doctora Wanda Barfield, directora de la División de Salud Reproductiva.
Los investigadores plantean que la variación que se presenta en los estados es reflejo de las tendencias de prescripción de opiáceos. Por ejemplo en West Virginia se pescribieron en el año 2012 una proporción de 138 recetas de opioides por cada 100 personas . Eso podría traducirse más tarde en altas tasas de madres adictas a los opioides.
115 estadounidenses mueren cada día
De acuerdo con los registros del CDC, la epidemia del abuso de opiáceos cobra la vida de 115 estadounidenses cada día.
El aumento de potenciales consumidores de calmantes se ha visto retroalimentado los últimos años por un mayor número de prescripciones médicas de sustancias, que antes se limitaban a traumas agudos posoperatorios o a enfermos terminales.
La inclusión de pacientes con síntomas leves, dolores más o menos crónicos, que en Estados Unidos superan los 110 millones de personas, ha disparado el número de productos farmacéuticos en el mercado.
Entre los calmantes más recetados figuran: oxicodona, hidrocodona, codeína, morfina, fentanilo, entre otros.