La humanidad debe tomar medidas «rápidas» para hacer frente a la «agresión» de Israel, declaró este viernes 14 de mayo el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y añadió que «este Estado terrorista» que intenta saquear una ciudad como Jerusalén —que alberga lugares sagrados para musulmanes, cristianos y judíos— «ha traspasado todos los límites«.
Al hablar por videoconferencia con los miembros de su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AK), el mandatario planteó que «es imperativo que el Consejo de Seguridad de la ONU tome medidas para garantizar la paz en Jerusalén, de acuerdo con las decisiones de la Asamblea General». En ese sentido, indicó que Turquía está lista para apoyar activamente cualquier iniciativa adoptada por la ONU, y agregó que su nación «no guardará silencio», incluso si el resto del mundo ignora los acontecimientos en Gaza.
«Es un deber de toda la humanidad resistir la agresión [de Israel] contra las ciudades palestinas y Jerusalén», enfatizó Erdogan, para agregar que la Organización de Cooperación Islámica (OCI) también debería adoptar una postura «concreta» sobre el tema, pues de lo contrario esa organización simplemente desacreditaría su propia existencia.
«Si no detenemos de inmediato la agresión de Israel» en Palestina y en Jerusalén, «mañana todos serán blanco de esa mentalidad brutal«, aseveró.
Erdogan criticó duramente a los líderes de otras naciones que han apoyado las acciones de Israel en Gaza, y subrayó que aquellos que optan por permanecer en silencio o respaldar al país hebreo «por razones políticas e ideológicas, deben saber que su turno también llegará algún día».
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía comunicó el viernes que los ataques aéreos israelíes en Gaza dejaron heridos a un camarógrafo y un reportero gráfico de la agencia turca Anadolu, y también provocaron daños a escuelas subvencionadas por las Naciones Unidas, además de causar un «rápido aumento» del número de víctimas civiles.
«Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que intervenga rápidamente a fin de que Israel detenga estos ataques, que causarán más pérdidas de vidas civiles», advirtió el ministerio.
La escalada de la tensión entre israelíes y palestinos ha alcanzado un punto álgido tras semanas de creciente hostilidad. La indignación de los palestinos ante las barreras de seguridad colocadas en Jerusalén Este durante el Ramadán y el desalojo de un vecindario árabe fueron detonantes de la ola de violencia.
El pasado lunes, cientos de personas resultaron heridas en el asalto a la mezquita de Al Aqsa por fuerzas israelíes, en medio de las protestas contra el desalojo de familias palestinas del barrio de Sheij Jarrah, en Jerusalén Este. El mismo día, poco después que expirara su ultimátum para que Israel retirara sus fuerzas de esos dos puntos conflictivos de la ciudad, Hamás atacó a Israel con cohetes desde Gaza, señalando que era una respuesta a los «crímenes y agresiones» israelíes.
Las Fuerzas de Defensa de Israel respondieron con ataques aéreos contra la Franja de Gaza, que se han prolongado en los siguientes días y entre otros graves daños han provocado la caída de tres edificios de gran altura.
Fuente: RT.