14 personas fueron detenidas por su posible implicación en el atentado terrorista que el miércoles sacudió a la capital turca.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aseguró que el atentado «es obra del PKK [Partido de los Trabajadores kurdos] y el Partido de la Unión Democrática (PYD)«, y agregó que «habrá más detenciones, el hilo de ese crimen conduce a Turquía y al extranjero», advirtió el mandatario al intervenir en el Estado Mayor turco, donde llegó para expresar sus condolencias a los familiares de los fallecidos.
Por su parte, el líder kurdo de Siria, Saleh Muslim, negó la participación de su organización en el atentado de Ankara y acusó del siniestro al grupo terrorista Estado Islámico.
Un coche bomba explotó el miércoles en las proximidades de las sedes del Parlamento y el Estado Mayor turco, en el centro de Ankara. La explosión ocurrió junto a un vehículo de transporte militar que se detuvo en un semáforo rojo en plena hora punta.
El ataque se saldó con 28 muertos y 61 heridos, según el balance actualizado.