El diputado de la Kneset (Parlamento israelí) Zuheir Bahloul, árabe israelí de la Unión Sionista, anunció hoy sábado que deja su escaño en protesta por la aprobación de la Ley Básica del Estado-nación judío, que define a Israel como «la patria del pueblo judío» y otorga a los judíos el derecho exclusivo a la autodeterminación, además de despojar al árabe de su estatus de lengua oficial.
El parlamentario denunció que esa ley lo oprime tanto a él como al pueblo que lo eligió como su representante en el Parlamento.
«El gobierno somete a la Kneset a sus caprichos, la Kneset se ha convertido en un sello de goma de una legislación excepcional y racista, huiré de ella como quien huye de un fuego embravecido», afirmó el diputado en Meet the Press.
La líder de la Unión Sionista, Tzipi Livni, respondió al anuncio de Bahlul diciendo que lamentaba su decisión, «especialmente en un momento en que la tiranía de la mayoría y el nacionalismo extremo está perjudicando a las minorías en nuestra sociedad».
«Este es el momento de combinar las fuerzas de todos los que creemos en un Estado de Israel que sea tanto judío como democrático, con igualdad para todos», señaló Livni.
El Partido Laborista emitió un comunicado oficial en el que lamentó el repentino anuncio de Bahloul. La Ley del Estado-nación judío es «una patada en la cabeza a más de la quinta parte de la población de Israel, que sería un Estado judío con o sin ella».
«Cuando regresemos al poder enmendaremos esta ley también, y le agregaremos lo que creemos obvio, la palabra ‘igualdad'», subrayó el comunicado.
La diputada laborista Shelly Yacimovich indicó, por su parte, que «el hecho de que un árabe israelí profundamente involucrado en la sociedad israelí ya no pueda permanecer en la Kneset es una de las muchas consecuencias perjudiciales de la racista Ley del Estado-nación, tan destructiva para la sociedad israelí».
El domingo pasado, legisladores de la comunidad drusa de Israel presentaron una demanda al Tribunal Supremo de Justicia contra la ley.
Un centenar de oficiales drusos en la reserva del Ejército israelí sumaron sus voces a la demanda el miércoles pasado.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, mantuvo una reunión con los líderes drusos para analizar el impacto de la nueva ley en la comunidad drusa de Israel.