El vocal de la sociedad civil ante el Consejo Nacional para la Prevención y Control del sida (Conasida), Luis Adrián Quiroz, afirmó que después de cuatro meses de que inició la licitación para la compra de medicamentos, el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) no informa sobre el avance del proceso respecto de los antirretrovirales para el control del VIH/sida.
Comentó que aunque las instituciones del sector público ampliar los contratos de 2020 y el abasto de las terapias está asegurado hasta mediados de abril, el hecho de carecer de información sobre la asignación de contratos, las cantidades solicitadas y, sobretodo, el sistema de distribución de los productos, son “señales de alarma”. Podría repetirse el escenario de 2019, cuando faltaron los fármacos en diversos estados. La compra se concretó después, pero no hubo un mecanismo eficiente de distribución.
Por eso, los medicamentos, que se deben mantener en refrigeración, se trasladaron en camionetas, propiedad de los servicios estatales de salud. El activista, coordinador general de Derechohabientes viviendo con VIH del Instituto Mexicano del Seguro Social (Dvvimss) recordó que la suspensión de los tratamientos antirretrovirales pone en riesgo la salud de las personas, porque el virus puede llegar a generar resistencia.
Manifestó que la alarma creció luego de una reunión convocada ayer por Conasida a fin de que el Insabi presentara un reporte sobre el avance de la licitación. Participó Carlos Piatzini Guerrero, director de Administración de Planes de ese organismo, quien “no dio ninguna información, aunque reconoció que de algunos productos” el proceso de compra terminará en junio.
No dio más detalles sobre el tipo de medicamentos que llegarán en ese mes, pero de ser así, habrá desabasto porque las ampliaciones de contratos firmadas por las instituciones concluyen en marzo y no hay posibilidad de prórrogas adicionales, apuntó.
Por decisión del gobierno federal, las adquisiciones de medicamentos y material de curación están a cargo de la Oficina de Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops) y de acuerdo con el calendario difundido por el organismo, se encuentra analizando las ofertas económicas presentadas por los posibles proveedores y en las próximas semanas tendría que emitir los fallos.
De cumplirse esos plazos , los laboratorios ganadores contarán con escasos dos meses para producir y hacer las primeras entregas en mayo, como ofreció Unops. En tanto, el gobierno deberá estar preparado para realizar de manera ágil y segura la distribución de los productos.
Fuente: La Jornada
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