Las principales centrales de trabajadores de Argentina, así como organizaciones sociales, movimientos de izquierda y de la economía popular, iniciaron este miércoles 24 de enero un paro general de 12 horas en contra de las medidas del gobierno de Javier Milei.
Podría interesarte: Política económica de Milei es un ‘robo en despoblado’, señala AMLO
La protesta, que incluye una movilización a la sede del Congreso de la Nación en la ciudad de Buenos Aires, fue organizada por la Confederación General del Trabajo (CGT), las dos ramas de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), entre otras.
La primera gran protesta gremial en los últimos cuatro años se realiza en rechazo a las medidas de desregulación política y económica adoptadas por el gobierno, que dispuso un ajuste del gasto público.
La huelga general comenzó a las 12:00 de la tarde, aunque el servicio de transporte público se sumará a la medida desde las 7 de la noche para facilitar la movilidad de quienes participen en la movilización.
El gobierno argentino ha rechazado la protesta, por lo que el vocero presidencial, Manuel Adorni, señaló que «es un absoluto sinsentido«.
Los primeros en llegar frente al Congreso fueron los afiliados al Sindicato de Camioneros, a la Unión Obrera de la Construcción y a la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), junto a militantes del Movimiento Popular La Dignidad, del Movimiento Evita y de la organización Liberación Popular.
Se hicieron también presentes grupos del Movimiento Socialista de los Trabajadores, del Partido Obrero y del Polo Obrero.
«La gente tiene bronca porque hay decepción» dijo Daer a la prensa local con relación a las medidas gubernamentales.
En tanto, el dirigente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, dijo que la medida de protesta se realiza para «defender los derechos populares«.
El gobierno argentino montó un operativo junto con autoridades de la ciudad de Buenos Aires y desplegó camiones hidrantes, carros de asalto, camionetas con efectivos y motos en las principales esquinas de la capital del país.
«Este gobierno apunta a aterrorizar a la población, pero hoy vamos a tener una demostración de que el miedo no triunfa», añadió Belliboni a la prensa local.
Al paro en Argentina se han sumado empleados bancarios, de hospitales, estatales, de recolección de residuos, de correos y puertos, además de gremios de la aviación comercial, por lo que la línea emblema Aerolíneas Argentinas canceló 295 vuelos, con unos 20 mil pasajeros afectados.
El programa implementado por el gobierno recorta el gasto público e impulsa una amplia desregulación en materia política y económica mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), así como un proyecto de ley que se debate en la Cámara de Diputados.
De manera combinada plantean desregular el comercio, los servicios y la industria, así como dejar sin efecto toda normativa que «impida la libre iniciativa privada».
Ambos instrumentos derogan o modifican alrededor de 300 regulaciones, entre ellas las que impiden privatizar empresas públicas.
Establecen, además, cambios en materia de empleo, impuestos, jubilaciones, régimen de partidos y composición de la Cámara de Diputados.
El presidente Milei dijo el pasado lunes 22 de enero que la protesta realizada seis semanas de su asunción, demuestra que una parte del país «se quiere quedar en el atraso, el pasado y la decadencia», frente a «otro modelo» que busca poner a Argentina en «el camino de ser desarrollados».
Foto e información: Agencia Xinhua
Recuerda suscribirte a nuestro boletín
📲 https://bit.ly/3tgVlS0
💬 https://t.me/ciudadanomx
📰 elciudadano.com