Cinco horas, el calvario de espera para prueba covid en Puebla

Por Anaid Piñas y Alexis Lira Reyes

Para obtener un justificante médico, las personas que deseen realizarse una prueba de antígenos y descartar covid-19 tienen que hacer largas filas de cinco horas para conseguirlo.

Con el papel que obtienen, podrán justificar sus faltas, evitar sanciones o incluso despidos, de acuerdo con los derechohabientes de la Unidad Médica Familiar 08 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

En la capital, cientos de habitantes van de clínica en clínica para realizarse una prueba y conocer su estado de salud, arriesgándose a un contagio al convivir con tantas personas enfermas.

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Para algunos, este fue su segundo intento de conseguir un resultado, pues debido a que un sólo médico atiende en el Módulo Respiratorio, las oportunidades de pasar se reducen y los tiempos de espera superan las cuatro horas.

Carmen, derechohabiente de la Unidad Médica Familiar 07 y promotora de servicios, no pudo obtener un examen en su clínica, por lo que llegó a la UMF 08 para lograrlo; sin embargo, no pudo obtener la incapacidad, a pesar de tener fiebre y presentar síntomas fuertes de resfriado.

«Aquí pude pasar más rápido, porque aquí está asegurado mi esposo, pero no me dieron ni mis resultados ni la incapacidad, que porque no aparezco en el sistema», lamentó la mujer.

Añadió que sin ese documento no puede pedir días, porque le serán descontados e incluso la podrían dar de baja en caso de que se ausente en caso de que su situación se agrave.

Uno más de los interesados en obtener la prueba fue Adrián Brito, quién trabaja en una clínica dental al igual que su esposa. Ambos estuvieron en contacto con personas enfermas y al presentar síntomas de resfriado decidieron hacerse la prueba.

El paciente señaló que más allá de que existan sanciones por parte de los jefes o empresas, debe haber responsabilidad conjunta, pues alguien enfermo no debe presentarse a laborar y exponer a otros a un contagio.

Otros con más suerte, como Israel Rodríguez, empleado de EuroWipe de México, fueron enviados por sus empresas a tomarse una prueba.

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Israel perdió el sentido del gusto y del olfato hace unos días por lo que fue a buscar su justificante para aislarse con tranquilidad.

De las más de 15 personas que se encontraban formadas, esperando su turno para pasar, al menos nueve presentaban síntomas respiratorios, cómo tos o estornudos.

En tanto, el doctor Luis Fernando Fernández, explicó que la toma de muestras, inician a partir de las 8:00 horas y terminan pasadas las 18:00 horas. Durante esta semana se han realizado un promedio de 60 pruebas al día.

Las pruebas son para todas las personas que las requieran, agregó. Aquellos que no son derechohabientes tendrán que pagar por ellas.

En cuánto a las incapacidades, afirmó que sólo se otorgan cuando el paciente sea declarado positivo y haya justificación médica.

«La prueba varia según la sintomatología. Al día de hoy a hemos realizado unas 6 pruebas, pero la gente sigue llegando», relató.

Luis Fernando Fernández
Doctor

También comentó que las pruebas PCR son para las personas que presenten sintomatología respiratoria; mientras, las pruebas de antígenos son para tener un resultado más inmediato.

Empresas que piden pruebas covid-19 a trabajadores, las pagan: IP

En Puebla, hay algunas empresas, principalmente del sector industrial, que sí piden a sus trabajadores pruebas covid-19 al ingresar a sus centros de trabajo, pero cuando sucede, las compañías asumen el costo.

Así lo comentó, Rubén Furlong Martínez, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Puebla, quien indicó que esto depende del sector al que pertenezcan las compañías, porque cada una tiene protocolos distintos.

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“Probablemente sí hay empresas que están solicitando la prueba o cuando detectan un caso, hacen pruebas (…), si la empresa tiene el tamaño suficiente como para apoyar al trabajador o pagar la prueba, lo hace”, comentó.

Rubén Furlong Martínez
Presidente de la Coparmex

Refirió que, en total, hay cerca de 25 mil trabajadores que pertenecen a las empresas afiliadas a Coparmex, de los cuales, alrededor del 88 por ciento está vacunado.

Restauranteros, “mitad y mitad”

Por su parte, Olga Méndez Juárez, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) de Puebla, sostuvo que ningún restaurante puede obligar a sus trabajadores a pagar por la prueba de coronavirus.

Aunque, si se presentan casos sospechosos, sí se les piden y en el 50 por ciento de los casos, los dueños asumen una parte del costo de la prueba.

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Al corte del martes, añadió, el 96 por ciento de los trabajadores cuentan con su esquema completo, mientras, el resto les falta la segunda dosis o no han acudido por descuido.

Puntualizó que, en este momento, el sector poblano restaurantero tiene cerca de 30 contagios en trabajadores por el virus.

CCE afirma qué hay protocolos

De acuerdo con Ignacio Alarcón Rodríguez Pacheco, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Puebla, ninguna empresa poblana exige a sus trabajadores prueba covid-19.

El protocolo que siguen, señaló, es que, si sospechan de un caso, piden a la persona que vaya a descansar por siete días y después deben realizarse la prueba, en algunas ocasiones, el 95 por ciento de los empleadores los apoyan hasta con el 70 por ciento del costo. También aseguró que tienen un convenio con la Cruz Roja para que el examen sea más barato.

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Refirió que el sector está haciendo un esfuerzo importante en el tema del coronavirus que implica un 8 por ciento en los gastos de una empresa, pues se costea lo relacionado a las medidas sanitarias, pruebas, insumos, así como a la gente que va a descansar con goce de sueldo.

“Hoy en día, lo que implica en gasto es como un 8 por ciento solo en tema covid, cuando antes, hace dos años, ni siquiera existía esto”, concluyó.

Ignacio Alarcón Rodríguez Pacheco
Presidente del CCE

Foto: Agencia Enfoque

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