ONU Mujeres estima que a escala global, 73 por ciento de las mujeres en el mundo han estado expuestas o han experimentado alguna violencia sexual digital o en línea. En Puebla, el delito de violación a la intimidad sexual se ha incrementado exponencialmente, datos de la Fiscalía General del Estado (FGE) revelan que las carpetas de investigación por denuncias han pasado 106 casos en 2019 a 248 en 2021.

Este miércoles, la activista conocida como Andi Martín del Campo como la organización Sororidad Puebla denunciaron el canal de Telegram “Pelle T3 Puebla Filtro” red de agresores que trafican packs, difunden y comparten fotos de poblanas desnudas con contenido erótico sexual sin el consentimiento de la víctima.

Mediante Instagram, la sexóloga y psicóloga, Andi Martín del Campo, acusó que un usuario identificado como “Rokubungi” creó el grupo de Telegram, que es una puerta de acceso para ingresar a otro grupo aún más selecto o VIP.

Reveló que los requisitos para entrar a ese grupo es enviar tres “packs” de mujeres poblanas donde se les vean pechos o entrepierna, mostrar caras de poblanas desnudas y compartir su red social, con la advertencia de que  “no se aceptan gordas” y  que “los packs comunes” no cuentan.

“¿Tu ex te fue infiel? Es momento de vengarte”: grupo Telegram

El colectivo Sororidad Poblana denunció el grupo de “Pelle T3 Puebla Filtro”, exhibió pruebas de los delitos de violencia digital y lanzó una voz de alerta porque también se puede tratar de sitio de difusión de pornografía infantil, pues hay fotos de menores de edad, estudiantes de bachillerato y secundaria.

En su página de Instagram Sororidad_Poblana publicó una fotografía el oficio 2333/2021 dirigido a la Directora del Centro de Justicia para las Mujeres del Estado de Puebla, interpuesta el 23 de noviembre de 2021, en el que se denuncia un caso de violación a la intimidad sexual por un integrante del grupo.

“Hasta el momento no se ha abierto la carpeta porque las autoridades estaban de ‘vacaciones’ y sin la valoración psicológica no se ha podido asignar un agente que lleve el caso”, denunció Sororidad Puebla.

Sororas Puebla, en un post al que titula “Quienes son los culpables” señala al usuario Rokubungi por difundir el contenido de una de las víctimas registrada en el colectivo e incluso publica los mensajes de WhatsApp donde constan las amenazas.

“Hay un culpable confirmado en difundir el contenido de una de nuestras víctimas, ahora la están acosando, tuvo que cambiar su número y cerrar sus redes sociales.

El exnovio de una de las víctimas quien tiene una denuncia en su contra por el delito de violación a la intimidad sexual. El chico le prohibía cosas, la emborrachaba cuando quería tener relaciones sexuales. En una ocasión le esquinzó el brazo. Le compraba ropa provocativa y si ella decía una mala palabra le daba golpes en la boca para que no lo volviera a hacer, él decía que la “educaba” Ella cansada de sus malos tratos, decidió terminar con esa relación, fue entonces que él la amenazó con difundir sus fotos desnuda. Muchos hombres le comenzaron a acosar gracias a este grupo, donde le expusieron junto con su dirección, su correo electrónico y su número celular.

Ya hay denuncias en contra del chico pero las autoridades solo le dan largas a la víctima, ayúdame a hacer justicia”, se lee en el sitio de Instagram del colectivo feminista.

El colectivo mediante capturas de pantalla, evidencian que el grupo de Telegram tiene el propósito de violentar a parejas o exparejas, se lee por ejemplo:

 “¿Tu ex te fue infiel? Es momento de vengarte”

“Enfocado a quemar mujeres infieles o zorras de Puebla y probablemente ciberataques”

“Grupo para exponer, exhibir, preguntar sobre infieles poblanas. Quemarlas mediante fotos y videos”.

“Recordando la dinámica, ya tenemos otra chava a quien atacar en lista de espera. Apenas acabemos (testado) pasaré 10 PACKS a este grupo y la info de la otra chava, (más recompensas a quienes participaron)”

Se intensifica violencia de género en línea

Tonalli Pérez Saldaña, directora de Análisis de la Violencia de Género Mediática y Digital, del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia reveló que de acuerdo a la Georreferenciación de la Violencia de Género de la FGE, los delitos de violación a la intimidad sexual se han incrementado en más de 100 por ciento en los últimos tres años.

Precisó que en 2019 la FGE había concentrado 106 denuncias, para 2020 se interpusieron 190 y el año 2021 cerró con 248 carpetas de investigación.

Aunque celebró que cada vez hay más mujeres que acceden a mecanismos disponibles para denunciar, aseguró que hay una cifra negra de actos delictivos que no son reportados y no figuran en ninguna estadística.

Señaló que el delito de ciber-acoso no es desglosado por la FGE por datos públicos. Mediante una solicitud de acceso a la información se conoció que desde que se tipificó el delito hasta abril 2020 había 132 denuncias por ciberacoso, 88 por ciento interpuestas por mujeres de 20 a 24 años

Sólo dos delitos están tipificados en Puebla

En Puebla está vigente la Ley Olimpia que castiga con cárcel de 3 a 6 años a quien difunda fotografías íntimas de una persona sin su consentimiento, además de una multa de hasta 179 mil 240 pesos

La Ley Olimpia fue una iniciativa de la poblana Olimpia Coral Melo, quien fue víctima de difusión de un video íntimo, sin su consentimiento, luego de tras varios intentos de suicidio decidió luchar para que ese tipo de actos fueran sancionados.

Tonalli Pérez Saldaña, directora de Análisis de la Violencia de Género Mediática y Digital, del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia explicó que en materia de violencia digital en Puebla sólo dos delitos están tipificados: el delito a la violación de intimidad sexual y el delito de ciber-acoso.

Explicó que el 10 de diciembre de 2018 se aprobó la primera reforma al Código Penal, para incluir el delito de violación a la intimidad sexual en el artículo 225: “Comete el delito de violación a la intimidad sexual, quien con el fin de causar daño o la obtención de un beneficio: I. Divulgue, comparta, distribuya, publique y/o solicite la imagen de una persona desnuda parcial o totalmente de contenido erótico sexual, por cualquier medio ya sea impreso, grabado o digital, sin el consentimiento de la víctima. II. Divulgue, comparta, distribuya, publique y/o solicite por cualquier medio el contenido íntimo o sexual, sin el consentimiento de la víctima”

El 4 de abril de 2019 fue aprobada una adición al mismo Código para incluir el delito de ciberacoso en el artículo 278 Nonies: Comete el delito de ciberacoso quien hostigue o amenace por medio de las nuevas Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones (TICS), redes sociales, correo electrónico o cualquier espacio digital y cause un daño en la dignidad personal, o afecte la paz, la tranquilidad o la seguridad de las personas.

Grave, el impacto de la violencia sexual digital

La directora de Análisis de la Violencia de Género Mediática y Digital en el Consejo Ciudadano se refirió a la violencia digital como un fenómeno complejo, aseguró que hace falta difusión porque aun cuando hay normativa vigente, la sociedad no reconoce el delito o minimiza esta agresión.

“No se reconoce el impacto de la violencia sexual digital aunque es grave, ni siquiera se reconoce como una forma de violencia, las víctimas que sufren este fenómeno no encuentran apoyo en su familia o allegados para afrontarlo».

Refirió que falta también capacitación y sensibilización con perspectiva de género en autoridades pues su ignorancia e insensibilidad dificulta la aplicación de la ley, mecanismos disponibles para víctimas no se ofrecen completos o hay revictimización.

“En la medida en que podamos hablar más de violencia digital, y se señale como una forma de violencia, también mejorarán las políticas para prevenirla, atenderla y sancionarla”, dijo.

Llamó a la sociedad a brindar apoyo y acompañamiento de primera mano a quienes enfrentan este tipo de violencia, “lo que es virtual también es real, pues los daños generados son psicológicos, físicos, económico porque se modifican rutinas, dinámicas, se tiene que dejar de trabajar o incluso la escuela”, precisó.

Diversos estudios señalan que se han registrado impactos  sociales y de salud reproductiva y, a menudo, con violencia sexual y física fuera del espacio virtual. La violencia de género origina que las mujeres ya no se sientan seguras en Internet o fuera de la red, debido a la impunidad generalizada de los autores de esa violencia.

Esto se traduce en aislamiento social, que lleva a las víctimas o supervivientes a retirarse de la vida pública, incluidos la familia y sus amistades, y la movilidad limitada.

ONU Mujeres considera que en el mundo una de cada cinco usuarias de Internet vive en países donde el acoso y el abuso de las mujeres en línea es extremadamente improbable de ser castigado, citan análisis que documentan que más del 40 por ciento de mujeres que fueron objeto de violencia basada en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han reducido deliberadamente su presencia en línea.

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Fotos: Especial

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