Tras meses de anticipar la posible contratación de una línea de crédito para financiar el arranque de su administración, el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, descartó contratar deuda pública para el municipio, aunque ve posible gestionar un adelanto de participaciones federales.
En entrevista, comentó que «no va a ser necesario», pese al déficit financiero que -dijo- heredó de la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco, el cual superaba los 21.5 millones de pesos.
«No, por el momento no voy a tomar la solicitud de un endeudamiento de largo plazo o una línea de crédito, en dado caso que yo decida presentar una decisión de este tipo tendría que ser en un proyecto en especifico, pero hoy por hoy no va a ser necesario»
Eduardo Rivera Pérez
Presidente municipal de Puebla
Participaciones federales
Ante la aprobación del Congreso local, para que las Comunas puedan pedir un anticipo de sus recursos federales, comentó que usaría este recursos sólo para un «proyecto específico», el cual no detalló.
El 4 de noviembre, Rivera Pérez y la tesorera municipal, María Isabel García Ramos, señalaron que la pasada administración «no dejó un peso» e incluso acusó gastos «de última hora» y el uso de un fondo de contingencia por 80 millones de pesos.
Desde entonces, el alcalde mencionó la posibilidad de contratar deuda para concertar los programas sociales que prometió en campaña, como Infraestructura, servicio médico, guarderías, entre otros.
Durante la última comisión de Hacienda y Patrimonio del Cabildo, García Ramos dio a conocer que la Comuna percibió más recursos de los que proyectaba, además de que en entrevista mencionó que la recaudación del predial superó lo esperado.
Plantea bomberos municipales
Ante las afirmaciones del gobernador Miguel Barbosa Huerta, de que el municipio capitalino no tiene cuerpo de bomberos, Rivera Pérez planteó crear la corporación, aunque señalo que se requiere «una cantidad fuerte de recurso que hoy por hoy no tenemos».
En otro tema, el alcalde indicó que la Comuna suman 300 contagios de covid-19 en trabajadores, aunque ninguno de los casos es grave y no hay burócratas hospitalizados por el virus.