En respuesta al rezago legislativo con casi 10 mil iniciativas pendientes, la LXV Legislatura aprobó una reforma al Reglamento de la Cámara de Diputados. Esta modificación establece que las iniciativas y proposiciones no dictaminadas al finalizar una Legislatura se considerarán desechadas, procediendo a su archivo como asuntos concluidos.
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La reforma también aplica a las proposiciones con punto de acuerdo no dictaminadas dentro del periodo ordinario de sesiones en que fueron presentadas. Sin embargo, las minutas no dictaminadas continuarán en la siguiente Legislatura, siendo remitidas a las comisiones correspondientes una vez instaladas para seguir su proceso legislativo.
La Secretaría de Servicios Parlamentarios elaborará un listado de dictámenes al término de la Legislatura, y la Junta de Coordinación Política determinará los que se presentarán en el primer periodo de sesiones de la siguiente Legislatura.
El objetivo, según la diputada del PAN. Sonia Rocha Acosta, promotora de la reforma, es evitar la acumulación de asuntos en comisiones y resolver el rezago legislativo. La modificación busca agilizar la resolución de iniciativas y puntos de acuerdo, sin perder la esencia ni la observancia rigurosa del proceso legislativo.
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Foto: Archivo El Ciudadano
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