El oscurantismo mexicano

Tal cual la edad media, la ultraderecha o derecha conservadora, ultra y fascista se hizo presente en diversos comentarios sobre la inauguración de los juegos olímpicos de París 2024. Y por si fuera poco, los agentes que más hicieron visible sus elocuentes comentarios fueron los juniors, el hijo de Luis Pazos, Luis Pazos P, el hijo de Pedro Ferris, PEDRO FERRIZ H y un tal Eduardo Verástegui, entre otros.

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Referencias con elitismo, racismo, odio, transfobia, cual oscurantismo medieval. Ahogados en el berrinchismo y la mezquindad, se hace evidente que el dinero no te quita lo ignorante ni lo prepotente. 

Es importante establecer que lo que observamos en esta maraña son los valores de una derecha conservadora contra los valores de la derecha liberal. Aunque entre ellos no lo acepten.  Una Francia pro OTAN y pro colonialista, la autora del acontecimiento.

Es preciso indicar que la izquierda incluye las luchas de la comunidad LGBTyQ+ en su agenda, en sus estatutos, la diversidad establece que cualquier muestra de amor es buena, que se busca la atención de todas las minorías excluidas por el modelo económico imperante, por la indiferencia gubernamental y la corrupción. 

Por lo que para la izquierda la lucha por la diversidad es igual de importante como todas las demás. 

Pero además lo que se realizó en los juegos olímpicos ni siquiera tuvo que ver con una agenda de diversidad, sino un tema sumamente cultural, turístico y de marketing para los franceses. 

La reina decapitada y de fondo a la banda de metal Gojira con la revolución francesa. La representación de los Miserables de Víctor Hugo, el Moulin Rouge, la ópera “L’amour est un oiseau rebelle”, La Marsellesa, la artista Aya Nakamura, Julio Verne, El principito y la Monalisa, el tributo a las mujeres, la alta costura, los juegos de luces, la pirotecnia y hasta los minions, todo lo que se ha vuelto viral, que ha sido motivo para reconocer a Francia a nivel internacional estuvo presente en un espectáculo.

Turísticamente, París 2024 hizo de su ciudad un escenario y en cada representación refería una pieza de arte, de cine, de música, de arquitectura, las más comentadas digitalmente y las más virales en el mundo. 

París utilizó a su vez referencias visuales como Amelie, El fantasma de la ópera, el teatro, el cabaret, el fútbol, el cine, la música, el arte y la arquitectura. El bacanal griego y no la última cena, la representación de Dionisio y la Diosa del Sena, Sequana. 

Sin embargo, como parvada de tontos, ignorantes y retrogradas denostaban y azuzaban la inquisición, la prohibición, el linchamiento mediático, la provocación a las masas, al más antiguo estilo, unos verdaderos representantes del oscurantismo en México. 

De esos comentarios pudimos observar también distintos señalamientos de satanismo, de ocultismo, miedos proféticos, apocalípticos, provocando detestar lo que no se conoce, apelando a la ideología, al cristianismo; ¡no tomarás el nombre de dios en vano! 

El arte se interpreta en códigos, requiere técnica y sensibilidad, apela a la estética y debe provocar reacciones. Los parisinos hicieron arte de su inauguración. 

Y unos trogloditas comenzaron a bufar, a respingar, por el solo hecho de tener un pretexto para atacar al progresismo. Equivocados en todos los sentidos, ni progresismo, ni burla al cristianismo, sino sólo cultura. 

Una verdadera vergüenza, regresando a tiempos oscuros, de prohibición y censura, en pleno siglo XXI. 

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