Erupciones volcánicas afectarían infraestructura y vida cotidiana por décadas en Islandia

El estudio indica que esta serie de erupciones podría ser sólo el comienzo de un largo episodio volcánico

Lizzette Vela

30/06/2024 1:15pm

Las recientes erupciones volcánicas en Islandia podrían prolongarse durante décadas o incluso siglos, según un estudio publicado en la revista Terra Nova. Estas erupciones, iniciadas en 2021, han impactado especialmente la península de Reykjanes, situada al suroeste de la isla, afectando notablemente al municipio pesquero de Grindavík y áreas cercanas a la capital, Reikiavik.

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La región suroeste de Islandia, donde vive gran parte de la población y se encuentran infraestructuras críticas como el único aeropuerto internacional y varias centrales geotérmicas, ha sufrido severos daños. Estas centrales son esenciales para el suministro de agua caliente y electricidad en el país. Desde diciembre del año pasado, se han registrado cinco grandes erupciones volcánicas en esta zona, con lava cubriendo algunas viviendas.

Los investigadores han analizado datos sísmicos y propiedades químicas y físicas de la lava de los últimos tres años, concluyendo que la lava proviene de una misma cámara magmática subterránea. Este descubrimiento sugiere la existencia de un sistema magmático conectado, con una acumulación de magma a una profundidad de nueve a once kilómetros y una anchura de diez kilómetros, formada entre 2002 y 2020.

El estudio indica que esta serie de erupciones podría ser sólo el comienzo de un largo episodio volcánico. Sin embargo, los científicos no pueden predecir con certeza su duración. Ilya Bindeman, vulcanólogo y coautor del estudio, señaló en un comunicado de la Universidad de Oregón que la naturaleza es impredecible y que aunque podría surgir un patrón, siempre existirán excepciones e irregularidades.

Islandia, ubicada entre las placas tectónicas norteamericana y euroasiática, es conocida por su actividad volcánica frecuente. Mientras que las erupciones de los volcanes centrales suelen durar sólo días o semanas, las erupciones fisurales, como las observadas recientemente, pueden extenderse mucho más tiempo. Este fenómeno presenta desafíos significativos para la infraestructura y la vida en la región afectada.

En conclusión, la prolongada actividad volcánica en Islandia subraya la necesidad de una vigilancia continua y medidas de mitigación para proteger a la población y la infraestructura vital. La imprevisibilidad de la naturaleza volcánica resalta la importancia de la preparación ante desastres en este entorno geológicamente activo.