En conferencia matutina de prensa del 14 de mayo de 2021, el gobernador Miguel Barbosa Huerta hizo referencia a la situación jurídica en Líbano del empresario textilero Kamel Nacif Borge, corruptor de autoridades estatales, además de instigador del secuestro y tortura de la periodista Lydia Cacho, autora del libro periodístico “Los demonios del Edén”.
En esta obra periodística publicada en 2004, Lydia Cacho recogió diversos testimonios tanto de víctimas como de personajes involucrados en el mundo de pornografía infantil y la trata de blancas enfocada a los pedófilos y pederastas.
«Los demonios del Edén», obra de referencia en el periodismo mexicano contemporáneo, expuso nombres de empresarios prominentes, tales como el hotelero Jean Succar Kuri, quien fue detenido en 2006 en Arizona y pasó después más de una década cautivo en Almoloya, tras lo cual fue remitido al penal de Cancún, desde donde ha seguido maniobrando para conseguir reajustes a su sentencia, que ha logrado reducir de 11 a siete décadas.
Para profundizar, consulta: La periodista Lydia Cacho testifica en Líbano contra Kamel Nacif
Un empresario vengativo
De los sujetos mencionados en el libro, el más ofendido y quien tomó cartas inmediatas en el asunto fue el empresario Kamel Nacif Borge, quien tras recurrir a “su héroe”, el entonces gobernador Mario Marín, consiguió que se emitiera al vapor una orden de aprehensión, misma que se utilizó para fundamentar la abducción de Lydia Cacho en Cancún en 2005 y trasladarla a Puebla. La periodista declaró haber sido sometida a tratos vejatorios por parte de la autoridad estatal poblana, circunstancia que después propició investigaciones judiciales sobre toda la cadena de mando involucrada en el atropello.
El 14 de febrero de 2006, La Jornada filtró un audio de la llamada telefónica entre Kamel Nacif y el “góber precioso” Mario Marín, en la que el empresario pederasta libanés lo felicitaba por la captura de la periodista e incluso lo conminaba a internarla con “las tortilleras” (término discriminatorio aplicado a las mujeres de orientación lésbica) para así exponerla a una violación.
Aún con el arresto de Kamel Nacif y Succar Kuri, el gobernador Miguel Barbosa Huerta advirtió que “esta historia aún no está completa”, dando a entender que hay nombres que faltan por salir a la luz desde las cañerías del poder político y empresarial donde discurren las corrientes turbias de la pedofilia.
Por lo tanto, anunció que su gobierno se encuentra en completa disposición para dar seguimiento a cualquier denuncia que se interponga sobre el particular.