Fentanilo: el opioide sintético que arrasa con vidas en el norte

La crisis global del fentanilo es una tragedia sanitaria y social que recuerda a las epidemias de opioides anteriores

Lizzette Vela

01/09/2024 1:47pm

El fentanilo, un opioide sintético creado en 1960, ha ganado notoriedad en las últimas décadas por su alta potencia y su papel en la crisis de sobredosis que afecta a Europa, Estados Unidos y Canadá. Con una potencia aproximadamente 100 veces mayor que la morfina, el fentanilo se ha convertido en un «fantasma» que recorre el hemisferio norte, generando alarmas globales debido a su creciente impacto.

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En 2022, el fentanilo causó cerca del 75% de las muertes por sobredosis en Estados Unidos. Datos del Centro Nacional de Estadísticas de Salud revelan que aproximadamente 110,000 personas murieron por sobredosis de opioides, con el fentanilo como principal responsable. La droga, que se presenta como una «inyección letal«, ha arrasado con la vida de miles de jóvenes, que son el grupo más afectado.

El problema se agrava cuando el fentanilo se mezcla con otras drogas como heroína y cocaína, aumentando así el riesgo de sobredosis. En 2014, los cárteles mexicanos comenzaron a cortar estas drogas con fentanilo, lo que llevó a un aumento exponencial en el número de adictos y muertes. Esta expansión también ha causado estragos en el mercado musical y artístico, con recientes muertes de figuras prominentes por sobredosis.

El fentanilo, aunque se utiliza en contextos médicos para el manejo del dolor, ha sido reemplazado en el mercado ilegal por una alternativa aún más peligrosa. Los fabricantes chinos, principales productores de fentanilo, han enfrentado presiones internacionales para limitar su producción. En Argentina, la droga aún no ha causado estragos significativos, aunque se reportan casos esporádicos de muertes por sobredosis relacionadas con fentanilo.

La crisis global del fentanilo es una tragedia sanitaria y social que recuerda a las epidemias de opioides anteriores. La necesidad de una respuesta coordinada para combatir esta crisis es urgente, mientras el fentanilo continúa su expansión y la amenaza de una crisis similar en otras regiones del mundo se convierte en una preocupación creciente.