Infraestructura peatonal, en periferias del Centro Histórico poblano, está deteriorada

Registros abiertos, calles sin banqueta y huellas pododactiles destrozadas son algunas de las carencias en la infraestructura vial arrastra en la periferia del Centro Histórico, donde las personas optan por usar el arroyo vehicular por lo deplorable de las calles.

En un recorrido, se verificó que calles como la 9 Sur, a la altura de la 18 Poniente, el paso peatonal está bloqueado por reparaciones inconclusas a la banqueta, donde la única advertencia en una cinta de «Precaución» que lleva «días» colocada, comentaron peatones que frecuentan la zona.

Mientras tanto en la calle 10 Poniente, entre las avenidas 3 y 5 Sur, un registro está sin tapa y solo fue cubierto con una caja de cartón, que los propios comerciantes de la zona tiraron dentro del agujero, pues en esta zona circulan a diario personas y los mismos vendedores.

Si bien en las calles cercanas al zócalo capitalino, como Reforma, Palafox y Mendoza, 2 Poniente y 3 Oriente permanecen las huellas pododactiles, para personas con discapacidad visual, conforme avanzan las avenidas la infraestructura desaparece.

En las vialidades de la 4 y 6 Norte, hay diversos puntos donde el apoyo para la movilidad de las personas está fracturado o incompleto.

Aunado a las problemáticas anteriores, en las calles 4 y hasta la 18 Poniente la circulación peatonal está impedida por los vendedores de la vía pública, quiénes abarcan con sus puestos la banqueta, por lo que en algunos casos las personas transitan en el arrollo vehicular.

Apenas este viernes, una mujer fue rescatada tras caer en un registro abierto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). El agujero tenía una profundidad de dos metros y causó a la afectada lesiones que requirieron hospitalización.

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