CIUDAD DE PUEBLA, 24 DE ENERO DE 2025. Una joven tuvo que hacer frente a las labores de parto en una terminal de autobuses suburbanos, y aunque tal no sea el entorno ideal para un alumbramiento humano, la Naturaleza no siempre espera. Por fortuna contó con la solidaridad de la ciudadanía que le rodeaba, factor de peso para el buen desenlace del episodio.
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La mujer embarazada llegó un poco antes de las 8:00 am a la terminal de los autobuses que viajan entre Puebla y Cholula, ubicada en la Calle 6 poniente, entre 11 y 13 Norte, a espaldas del Mercado de Sabores.
Mientras esperaba sentada a que se aproximaba el camión, según relatan testigos, la mujer sudaba, resoplaba y daba muestras de impaciencia. Sin embargo, cuando uno de los autobuses finalmente se acercó al punto de abordaje, la mujer, en vez de subir al autobús, ingresó al sanitario de la terminal, donde súbitamente se le rompió la fuente y entró en labor de parto.
Sin experiencia de partera, pero con el corazón en la mano, una trabajadora de la terminal dirige el parto a buen término
Mujeres que en ese momento laboraban en la terminal se dieron cuenta de lo que sucedía, y según relatan versiones, al menos una estudiante de enfermería que se encontraba entre los presentes, por lo que ayudaron, dentro de sus posibilidades, a la joven embarazada en su abrumador trance.
Fue una de las trabajadoras de la terminal, la señora Patricia Ruiz, quien refiere haber ayudado a la extracción de la criaturita, que ya tenía su cabeza fuera del cuerpo de su mamá.
Estudiantes de enfermería resguardan a la criaturita y evalúan signos vitales de la mamá
Mientras tanto, la otra empleada de la terminal ya se había comunicado al número de emergencia. En lo que esta llegó, estudiantes de medicina que se encontraban en el lugar resguardaron con el máximo cuidado a la bebé y se mantuvieron al tanto de los signos vitales de la nueva mamá, a quien rodearon y confortaron.
Minutos después arribó al lugar una ambulancia con paramédicos y también una patrulla. Los paramédicos revisaron los signos vitales de madre e hija, que arrojaron un diagnóstico de estabilidad.
De inmediato, las trasladaron a bordo de la ambulancia a un hospital público para que la mamá y su nueva bebecita permanezcan en observación y reciban los cuidados necesarios.
Un acontecimiento que demuestra qué tipo de fibra predomina en el tejido social de Puebla.
FOTOGRAFÍA DE PORTADA: X
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