El fenómeno «tradwife», que promueve un estilo de vida de ama de casa tradicional, ha cobrado fuerza en las redes sociales, generando un intenso debate sobre su significado y su impacto en la igualdad de género.
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La tendencia, que defiende el regreso al modelo de familia de los años 50, captó la atención tanto de sus seguidores como de sus críticos, quienes cuestionan si este movimiento representa un retroceso en los avances feministas.
Influencers como Hannah Neeleman y Nara Smith popularizó el estilo de vida «tradwife«, compartiendo en sus redes sociales imágenes de su vida doméstica idealizada. Neeleman, con su granja en Utah y su enfoque en la vida rural, y Smith, con un enfoque más moderno, pero igualmente centrado en el hogar, han acumulado millones de seguidores. Sin embargo, esta imagen romántica de la vida doméstica omite las dificultades y sacrificios que implica renunciar a una carrera profesional para dedicarse exclusivamente al hogar.
El movimiento «tradwife» suscitó preocupaciones sobre la glorificación de un modelo de género que relega a las mujeres a roles tradicionales y, en algunos casos, las aleja de la participación económica y social. A pesar de que algunas tradwives argumentan que su elección es un acto de empoderamiento, críticos señalan que este retorno a los valores tradicionales puede reforzar estereotipos de género y perpetuar desigualdades.
Algunas defensoras de este estilo de vida argumentan que su enfoque en la vida doméstica eleva el valor del trabajo no remunerado, destacando la importancia del cuidado del hogar y la familia. No obstante, otros consideran que la idealización de estas labores puede llevar a un romanticismo peligroso que ignora las realidades económicas y sociales que muchas mujeres enfrentan.
El debate sobre la tendencia «tradwife» también reveló contradicciones dentro del propio movimiento. Aunque muchas de estas mujeres se presentan como defensoras de la tradición, han construido lucrativos negocios en línea, beneficiándose del mismo feminismo que critican. Esto generó preguntas sobre la autenticidad y las motivaciones detrás de esta elección de vida.
El resurgimiento del «tradwife» invita a una reflexión más profunda sobre el equilibrio entre libertad de elección y los impactos sociales de perpetuar modelos de género tradicionales. Mientras algunas lo ven como un estilo de vida liberador, otros advierten sobre los riesgos de idealizar un pasado que limitaba las opciones de las mujeres.
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Foto: Redes
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