La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) sigue causando estragos en España, siendo Cataluña una de las regiones más golpeadas por las intensas lluvias. Las precipitaciones han causado interrupciones en servicios esenciales, incluyendo el transporte ferroviario, las principales vías de circulación y el aeropuerto de Barcelona-El Prat.
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La situación es especialmente crítica en Barcelona y sus alrededores. El tráfico ferroviario de corta, media y larga distancia ha sido suspendido debido a inundaciones que han afectado gravemente las vías. En cuanto al aeropuerto de El Prat, sus pistas y áreas de embarque han quedado anegadas, provocando la cancelación parcial de vuelos y la evacuación de pasajeros, que debieron abandonar las instalaciones entre agua que les llegaba hasta la cintura. Las principales carreteras también permanecen cerradas por el peligro que representan las inundaciones.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) había previsto lluvias de hasta 50 litros por metro cuadrado en Cataluña, pero la magnitud del fenómeno ha superado todas las expectativas, dejando incomunicada a gran parte de la región. Ante esta emergencia, el gobierno catalán, encabezado por Salvador Illa, ha declarado la alerta roja, advirtiendo sobre el riesgo inminente de desbordamientos y derrumbes.
Por otro lado, la ciudad de Valencia experimenta una ligera mejoría tras una semana de lluvias devastadoras. Allí, casi 8 mil efectivos del Ejército se han desplegado para asistir a las comunidades afectadas. Sin embargo, el balance de los daños es considerable: más de 100 mil vehículos han sido destruidos y alrededor de 54 mil empresas han sufrido pérdidas. La Cámara de Comercio de Valencia estima que entre 4 mil y 4 mil 500 locales comerciales se han visto afectados, junto con varios mercados y centros comerciales.
A pesar de los esfuerzos de recuperación, la tensión persiste en Valencia. Recientemente, la visita de los reyes Felipe y Letizia y del presidente Pedro Sánchez a la región fue interrumpida por disturbios. Manifestantes vinculados a la extrema derecha arrojaron objetos al presidente, lo que provocó su evacuación.
En Cataluña, las lluvias han interrumpido temporalmente el tráfico de trenes de alta velocidad en la línea Madrid-Barcelona, a la altura de El Prat de Llobregat. Aunque el servicio se ha restablecido parcialmente, solo se opera por una vía, generando retrasos significativos.
Con la situación aún en desarrollo, las autoridades locales y nacionales permanecen en alerta máxima, mientras la DANA sigue afectando vastas zonas del país, prolongando una crisis meteorológica que no da señales de remitir.
Foto: X
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