Nacen más de 13 mil bebés de niñas de entre 10 y 17 años en Puebla, de 2019 a 2021

Evelin tuvo a su bebé a los 16 años y comparte que ser madre es una responsabilidad enorme, “y más para niñas que terminan cuidando niños”

Nacen más de 13 mil bebés de niñas de entre 10 y 17 años en Puebla, de 2019 a 2021

Autor: Anaid Piñas

En los últimos tres años, nacieron 13 mil 591 bebés en el estado de Puebla, cuyas madres tenían entre 10 y 17 años de edad al momento del parto, de acuerdo con la Secretaría de Salud estatal.

Para Evelin García, una chica que vive en la región del «triángulo rojo», convertirse en madre antes de los 18 años ha representado un reto de vida, debido a los problemas de salud a los que ha tenido que enfrentarse desde el momento del embarazo y hasta la concepción.

En esa situación se pueden encontrar mujeres de al menos 60 municipios en Puebla. Los embarazos a adolescentes han impactado más en 2019.

De acuerdo con la respuesta a una solicitud de información realizada por El Ciudadano México, la Secretaría de Salud de Puebla reportó que el número de partos de niñas en 2019 fue de 5 mil 665, 2020 en 3 mil 998, y 2021 descendieron a 3 mil 591.

La capital, foco rojo

Puebla es el municipio que más nacimientos registra, ya que durante 2019 se reportaron mil 379 nacimientos; en 2020 se registraron mil 146 casos; y en 2021 se contabilizaron 911 bebés, es decir, la tendencia ha ido a la baja.

El número de partos de niñas en 2019 fue de 5 mil 665./Foto: Humberto Aguirre

En 2019, entre los 60 municipios en los que se reportaron nacimientos de menores de edad, los que registraron mayor incidencia fueron Tehuacán, con 491 casos; Teziutlán, con 362; Atlixco, con 287; San Andrés Cholula, con 281; Huejotzingo, con 240; Tecamachalco, con 217; Tepeaca, con 212; Huauchinango, con 209; y Zacatlán con 199.

Para 2020, de los 59 municipios con registros destacan Tehuacán, con 372; Atlixco, con 197; Huauchinango, con 178; Izúcar de Matamoros, con 169; Tlatlauquitepec, con 166; Teziutlán, con 156; Zacatlán, con 144; Tepeaca, con 120; y San Martín Texmelucan, con 114.

El año pasado, la Secretaría de Salud del Estado de Puebla reportó nacimientos en 52 municipios, de los cuales Tehuacán, con 406 casos; Tepeaca, con 209; Atlixco, con 205; Tlatlauquitepec, con 161; Zacatlán, con 144; Izúcar de Matamoros, con 136; Tecamachalco, con 135; así como San Martín Texmelucan y Huauchinango con 134 registros cada uno, fueron los de mayor incidencia.

Cabe destacar que algunas demarcaciones como Tecamachalco, Tepeaca y San Martín Texmelucan forman parte de la zona delictiva de la entidad conocida como “triángulo rojo”, lo que complica la situación de las madres niñas y adolescentes de la zona.

Ilustración: Iván Rojas

En contraste, murieron 280 bebés tras su alumbramiento durante los tres años analizados. En 2019 se reportaron 116 defunciones; en 2020 se contabilizaron 113 fallecimientos; y de enero a octubre de 2021 se contabilizaron 51 bajas.

Entre los municipios con mayor incidencia se encuentran Puebla capital, San Andrés Cholula, Tehuacán, Teziutlán, e Izúcar de Matamoros.

Mamá adolescente en el «triángulo rojo»

Evelin García se embarazó a la edad de 16 años. El primer inconveniente con el que se encontró fue con la desaprobación de su madre, una mujer que tuvo que sacarla adelante sola, pues sabía que a su corta edad sería complicado, a pesar de que contara con el apoyo de su pareja y futuro padre: otro menor de edad.

Ser madre representaría para ella problemas familiares, laborales y económicos.

Durante la gestación su salud se vio comprometida por problemas de anemia, mismos que se convirtieron en amenaza de aborto, entre la pérdida de peso y la posibilidad de contraer covid-19, porque a pesar de ser población de riesgo al ser menor de edad no pudo obtener una vacuna contra el SARS-CoV-2.

Evelin recibió el apoyo de su pareja, quien también es menor de edad./Foto: Anaid Piñas

Con el tratamiento indicado logró salir adelante; sin embargo, asistir a las consultas médicas en Tepeaca se volvió complicado, pues la zona se torna peligrosa a ciertas horas del día y los precios eran apenas costeables.

La situación económica tampoco mejoró después del parto, pues un aparente contagio asintomático de covid complicó la salud del bebé y fue necesario que permaneciera internado por varias semanas; además, el trabajo del joven de 17 años no fue suficiente para pagar la cuenta del hospital en ese momento, ya que ser campesino deja menos dinero que ser huachicolero o ladrón de tráileres.

Por ahora, Evelin y su bebé se encuentran bien, pero sigue pensando que ser madre “es una responsabilidad enorme para la que muchas personas no están preparadas y más para niñas que terminan cuidando niños”.

También lamenta que aunque quiera salir a trabajar para apoyar con los gastos de la casa, la falta de estudios y la edad son obstáculos que le cierran las puertas para intentar superarse y ofrecer mejores cosas a su hijo.

Ilustración: Iván Rojas

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