Familias abarrotaron el mercado del 5 de Mayo, ubicado en la calle 16 Poniente, en el Centro Histórico, para realizar compras para el festejo de Nochebuena y Navidad, por ello vendedores ocuparon las calles para ofrecer sus productos a los ciudadanos.
La mañana de este jueves, la vialidad fue cerrada a los automovilistas en ambos sentidos, desde la 5 Sur hasta la 18 Poniente, donde vendedores ambulantes se instalaron en las banquetas y la mitad del arroyo vehicular.
Mujeres, hombres y familias completas, donde también iban niños, acudieron al mercado, así como a locales aledaños donde ofrecen mariscos, quienes montaron sus puestos en la 16 Poniente y 3 Sur.
Por lo anterior, las unidades de transporte público modificaron sus rutas para evitar el tráfico y la gran afluencia de peatones que desbordaron la vía pública.
Contrario al año pasado, cuando la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom) implementó un cerco desde la calle 18 Poniente para inhibir el paso de personas al Centro Histórico. Sin embargo, la actual administración, encabezada por Eduardo Rivera Pérez, no realizó alguna acción para evitar las aglomeraciones, debido a la actual pandemia por Covid-19.
En calles del Centro Histórico se registró la venta de pirotecnia en pequeños puestos ambulantes los cuales tenían un costo de 10 hasta los 30 pesos, luego que el director de Normatividad del Ayuntamiento de Puebla, Enrique Guevara Montiel, anunció que realizaría un operativo.
Ante la afluencia, los visitantes no cumplían con las medidas de distanciamiento social, mientras que otras personas no portaban cubrebocas o lo utilizaban, pero de manera incorrecta, sin cubrir la boca y nariz completamente.
La semana pasada, el edil Eduardo Rivera Pérez descartó el cierre las calles del Centro Histórico o la plancha del zócalo, en caso de aumentar los contagios por el Covid-19.
Foto: Humberto Aguirre