Investigadores de la Universidad de California descubrieron recientemente que el consumo de tabaco y marihuana puede aumentar significativamente el riesgo de depresión y ansiedad.
El estudio, publicado en la revista PLOS ONE, analizó los datos de 53.843 adultos que participaron en encuestas online entre 2020 y 2022. Los científicos averiguaron que el 26,5% de los que consumían tanto tabaco como marihuana sufrían ansiedad, mientras que el 28,3% declararon estar deprimidos.
En el caso de los que no consumían ni marihuana ni tabaco, los investigadores descubrieron que menos del 12% experimentaba depresión o ansiedad.
El estudio concluyó además que las probabilidades de sufrir estos problemas de salud mental eran aproximadamente un 80% mayores para los que consumían marihuana y tabaco, en comparación con los que no los consumían en absoluto.
“Fumar marihuana y tabaco no ayuda a afrontar la ansiedad y la depresión, y puede agravar los problemas de salud mental a largo plazo. Coordinar la deshabituación tabáquica y cannábica con el tratamiento de salud mental puede ser beneficioso para las personas con consumo simultáneo de tabaco y cannabis. Además, el cribado del consumo de tabaco y cannabis debería aplicarse en los entornos de tratamiento de la salud mental”, afirmó Nguyen.
Aunque los investigadores pudieron extraer una conclusión del estudio, Nguyen admite que la relación entre estas sustancias y la salud humana no se conoce del todo y será necesario seguir investigando.