El pasado domingo 8 de diciembre, una balacera registrada en las inmediaciones de la Exhacienda de San Bartolo, en Puebla, resultó en la muerte de un hombre identificado como Jesús «N», alias El Marranero, líder del grupo criminal Guerreros Unidos. Según las autoridades locales, este sujeto, quien era buscado a nivel nacional, se encontraba en el lugar para asistir a una boda cuando fue atacado por un grupo armado.
También puedes leer: Matan a balazos en una boda a “El Marranero”, líder de los Guerreros Unidos en Iguala
El alcalde de Puebla, Pepe Chedraui confirmó que el ataque formaba parte de un ajuste de cuentas relacionado con el crimen organizado. “Una persona que vino de fuera, era una persona buscada por toda la República, es parte del ajuste de cuentas que traen”, declaró en una conferencia de prensa.
De acuerdo con testigos y grabaciones de cámaras de seguridad, los atacantes se acercaron al vehículo de Jesús «N» y dispararon alrededor de ocho veces, hiriéndolo de muerte. Los agresores huyeron rápidamente tras el ataque.
Con una historia de vínculos con las organizaciones más violentas de México, Jesús «N», conocido también como Chucho Brito, tenía un largo historial delictivo. En 2011, fue identificado como jefe de los Beltrán Leyva en Guerrero, y tras su detención en el mismo año, se le encontraron armas de uso exclusivo del Ejército, lo que incrementó su notoriedad en el mundo criminal. A pesar de su arresto, El Marranero fue liberado y posteriormente se unió a Guerreros Unidos, donde se encargó de operaciones de secuestro y asesinato.
Un documento oficial de las autoridades lo señala como jefe de sicarios de esta organización y aliado cercano de Juan Carlos Flores Ascencio, alias La Beba, quien fue ejecutado en 2021. Guerreros Unidos está estrechamente vinculado al caso de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa en 2014, un crimen que sigue siendo un símbolo de la impunidad y corrupción en el país. La Fiscalía General de la República (FGR) lo incluyó en una lista de 83 órdenes de aprehensión en 2022 por su presunta participación en este caso, aunque nunca fue capturado.
La organización Guerreros Unidos sigue siendo un actor central en la violencia en el sur de México, especialmente en Guerrero. En los últimos años, las investigaciones han revelado la participación de miembros del Ejército en el caso Ayotzinapa, lo que facilitó la desaparición de los estudiantes. Las autoridades aún investigan el contexto detrás del ataque en Puebla, sin que hasta el momento se haya detenido a ningún responsable.
Con la muerte de El Marranero, se cierra un capítulo más en la lucha contra la delincuencia organizada, pero las dudas persisten sobre el impacto que este asesinato tendrá en el futuro de Guerreros Unidos y la posible resolución del caso Ayotzinapa. Las autoridades siguen trabajando en el esclarecimiento de los hechos y en la captura de los responsables de la balacera en Puebla.
Foto: Redes
Recuerda suscribirte a nuestro boletín
📲 https://bit.ly/3tgVlS0
💬 https://t.me/ciudadanomx
📰 elciudadano.com