La otra semana empieza el plan de contingencia que el Gobierno comprometió con el grupo de trabajadores Unidos Contra el Asbesto, para hacer nuevos exámenes que permitan detectar su real condición de salud después de haber retirado el material desde la central Bocamina 1 de Coronel.
Los médicos especialistas de Santiago evaluarán a cerca de 30 y 35 operarios para tomarles un scanner de alta definición, espirometría y test de esfuerzo. Todo parte del plan de contingencia que obedece al punto en donde entidades de gobierno consideraron el malestar y las diferentes dudas que provenían de los trabajadores sobre los informes de la Mutual de Seguridad, los cuales revelaron que no mantenían complicaciones en su salud.
Omar González, el dirigente de los trabajadores Unidos Contra el Asbesto manifestó que es necesario contar con un diagnóstico adecuado y veraz sobre las problemáticas de salud que podrìan estar sufriendo.
Los trabajadores se desempeñaron en labores de retiro de más de 1.200 toneladas de asbesto, desde la termoeléctrica Bocamina I de Endesa en Coronel, en septiembre del 2014.
Cuando los movilizados -en ese tiempo- empezaron a denunciar molestias relacionadas a la constante inhalación de asbesto a la que estaban expuestos, además, apelan a la situación que vivió un trabajador el año pasado de 31 años, quien falleció tras presentar complicaciones respiratorias las cuales revelaron en la autopsia poca claridad sobre la verdadera causa de su deceso.
En el mismo escenario la Seremi de Salud aplicó una multa de 500 UTM a Endesa por faltas en el procedimiento, además de una sanción a la contratista Akeron Caf también con 500 UTM y a la Mutual de Seguridad con mil UTM debido a los sumarios por las denuncias previas.