Bajo la consigna «La reforma nos dejará bajo el puente» cerca de las 8:00 de esta mañana un grupo de alrededor de 40 estudiantes de instituciones privadas se instaló a protestar en la ribera del río Mapocho, armando en el lugar una simbólica «sala de clases».
«Consideramos que los estudiantes de las universidades privadas lamentablemente somos los fieles perjudicados de un modelo desigual, de segregación social y esta reforma educacional viene a sepultar una educación pública que nos permita estudiar sin endeudarnos», señaló a El Ciudadano Gabriel Iturra, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Central.
El vocero de la Confech agregó que «lamentablemente se mantiene también la lógica del lucro en los centros de formación técnica y en los institutos profesionales y no se sanciona con pena de cárcel a las personas naturales y jurídicas que lucran». Por esta razón, añadió Iturra, «los estudiantes de las universidades privadas hemos decidido comenzar a manifestarnos y es la lógica en estos momentos al interior de la ribera del río Mapocho».
El pasado viernes 10 de junio, la Confech se reunió con la ministra de Educación, Adriana Delpiano, para conocer un adelanto del proyecto de reforma a la Educación Superior que ingresará este mes de junio al parlamento para su tramitación. Tras el encuentro, los dirigentes se mostraron dudosos e insatisfechos respecto a que la iniciativa pueda dar respuesta a sus principales exigencias.
“Nuevamente nos encontramos con esbozos de una reforma alejada de las demandas históricas del movimiento estudiantil, dejando de lado reivindicaciones como el fin al lucro, la condonación de la deuda efectiva, la democratización de los planteles educativos, la necesidad de construir una educación pluricultural, por decir algunos”, fue el diagnóstico planteado por la organización estudiantil tras analizar en plenario los alcances que conocieron del proyecto.
Daniel Labbé Yáñez