Pobladores, pertenecientes al comité de allegados “Villa Vespucio Norte” de la comuna de Conchalí, llegaron la mañana del pasado 20 de marzo hasta La Moneda y las oficinas del Serviu Metropolitano para exigir a las autoridades de Gobierno que resuelvan el conflicto social creado por el alcalde PPD Carlos Sottolichio, que los mantiene sin poder construir sus viviendas sociales.
Los vecinos denunciaron que el jefe comunal, a cambio del apoyo electoral, prometió a distintas agrupaciones vecinales la entrega de un mismo terreno ubicado en los límites de la comuna, frente al Mall Plaza Norte.
La vocera de los allegados, Jocelyn Cartes, explicó que el año 2008, a cambio de trabajar en su campaña, Carlos Sottolichio les ofreció un terreno administrado por el municipio para levantar su viviendas sociales, promesa que se concretó, sin embargo, al momento de comenzar la construcción se toparon con el inconveniente de que había un grupo de vecinos (Ex cooperativa Oscar Heiremans) que alegaban derechos de propiedad sobre el espacio, demanda a la que el alcalde habría respondido asegurando que haría todos los trámites necesarios para devolverlo, a cambio de sus votos.
Consultado el edil respecto a esta situación se excusó argumentando que su promesa a la ex Cooperativa Oscar Heiremans se basó en su desconocimiento respecto a la real situación legal en la que se encontraba el terreno.
Una serie de documentos, en poder de ambas comunidades, demuestra que al menos desde el año 2006, tanto Serviu, como el Minvu y Bienes Nacionales, habían informado al municipio que el terreno en cuestión se encontraba en poder de Bienes Nacionales y que la demanda de los vecinos, que alegaban derechos de propiedad, no tenía ninguna justificación legal.
Todo lo anterior ha provocado un retraso de siete meses en la construcción de las viviendas sociales a las que postuló el comité de allegados, el que finalmente adquirió el terreno a través del Serviu, ya que sus pares afectados se han opuesto a la entrada de la constructora quemando los cierres perimetrales y la maquinaria.
El ex director del Serviu, Daniel Jhonson, quien en reiteradas ocasiones llamó a Sotolicchio a asumir su responsabilidad en el conflicto social, que hoy mantiene a 68 familias de la comuna viviendo de allegadas y en hacinamiento a pesar de contar con un proyecto de vivienda aprobado, endosó a la nueva administración la responsabilidad de concretar la construcción y de paso cumplir con una promesa de la Presidenta Michel Bachelet, quien en el año 2009 prometió al comité, en cuenta pública, que vería cumplido su sueño de la casa propia.
Por Marianela González
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