Fracasa IPC de la Salud

El anuncio del nuevo Superintendente confirma que el indicador perdió su injerencia y validez para los reajustes de los planes de salud, lo que ha significado que desde distintos sectores manifiesten su satisfacción con la medida, a pesar de la resistencia mostrada por las isapres. ¿Por qué el nuevo Superintendente decidió desestimarlo? ¿Representa un vacío legal para el actuar de las isapres?

Fracasa IPC de la Salud

Autor: Sebastian Saá

Isapres

Luego de un breve plazo desde su implementación, el Indicador Referencial de Costos de las Isapres (IRCI), conocido también como IPC de la Salud, el referente para que dichas empresas reajustaran los precios de sus planes, fue suspendido por el nuevo superintendente Sebastián Pavlovic.

La decisión se fundamenta en que, según la Superintendencia, algunas de las variables que se utilizan para la medición serían de directa responsabilidad de las mismas instituciones de salud. “Las Isapres tienen que entender que su modelo de negocios no está bien valorado por la población”, ha dicho Pavlovic.

Esto, a menos de una semana de que las isapres informen a la Superintendencia sobre los reajustes a los precios de los planes de salud, plazo que vence el próximo 31 de marzo.

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Ante este nuevo escenario, el vocero de la Fundación Creando Salud, Matías Goyenechea, respalda el anuncio de la autoridad, apuntando al actuar artificial de los dueños de las isapres y de los grandes conglomerados de empresas, quienes no tienen problemas para manipular el indicador al aumentar los precios o declarar mayores costos de las atenciones de salud.

Por ello, asegura que se requiere de un mecanismo neutral, advirtiendo que en este nuevo proceso de ajuste de precios de los planes las Isapres insistirán en actuar según sus propios criterios y de acuerdo a las rentabilidades que desean.

“La medida que toma la Superintendencia me parece que es absolutamente correcta, pues el IPC de la Salud es un indicador que está contaminado. Aquí lo que existe, en un escenario donde tenemos integración vertical de la industria de las isapres y las clínicas, es que se puede manipular los precios y también, lo que ha dicho la Superintendencia, que hay una inducción de prestaciones. La administración anterior, cuando instaura este IPC de la Salud, no estaba pensando en los usuarios, sino que en un mecanismo que otorgara legitimidad a las alzas de precios de las isapres”, denuncia.

Por su parte, el presidente del Colegio Médico, Enrique Paris, en línea con la decisión del Superintendente, junto con hacer un llamado urgente a los parlamentarios para legislar sobre el tema, expresa su preocupación por el 65 por ciento de las ganancias de las clínicas que surge de la relación con las isapres, rechazando las presiones hacia los profesionales.

“Tiene que haber un instrumento, es necesario, es lo que hay que conversar para que el cálculo sea legítimo y ese IPC o ese valor se fije o se norme en relación al aumento de los planes. No hay ninguna justificación para que los médicos exijan exámenes demás o sin necesidad. Los exámenes sólo se piden para certificar o asegurar un diagnóstico y para asegurar una buena clínica. Los médicos no deben aceptar esas presiones, pues está penado por el Código de Ética del Colegio Médico de Chile. Ese fue un argumento que inicialmente utilizó la Asociación de Isapres, auqnue luego cambiaron de postura”, aclara.

Precisamente, el presidente de la Asociación de Isapres, Hernán Doren, ha declarado que la eliminación del indicador “influirá directamente en los recursos de protección presentados en las Cortes de Apelaciones para congelar las alzas de los planes”.

En respuesta, el abogado Pedro Barría, representante de usuarios de la salud privada, afirma que esto no generará grandes transformaciones y que más del 95 por ciento de los planes de salud se encuentran absolutamente sobreapreciados, por lo que lo preocupante es lo que deben pagar las personas mensualmente.

Además, recuerda que durante 2013 la Corte de Apelaciones de Santiago recibió más de 150 mil recursos por alzas en el precio de los planes, los que en su gran mayoría fueron resueltos a favor de los usuarios.

“No ocurrirá nada muy distinto de lo que ha pasado hasta ahora, porque el IPC de la Salud fue invocado por las isapres muchas veces para justificar los reajustes. Sin embargo, en materia de recursos de protección la Corte de Apelaciones no admitió ese instrumento. En lo que sí habrá un cambio es en que queda más patente aún la falta de legitimidad de que las Isapres tengan la facultad de reajustar los precios base de los contratos de salud una vez al año. Creo que hoy la posición de las isapres frente a la Corte es peor que la que había el año pasado o antepasado”, explica.

Otro de los que ha manifestado su satisfacción con la medida es el diputado socialista Juan Luis Castro, integrante de la comisión de Salud de la Cámara, quien asevera que “este instrumento fue siempre solo referencial y nunca sirvió para fijar el precio en el alza de los planes de salud. Es decir, un IPC creado bajo el gobierno de Piñera que siempre fue letra muerta y un traje a la medida para las isapres”.

Por Fernando Seymour

Radio U.Chile


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