Con profunda preocupación observamos la extensión que alcanza el paro de los trabajadores portuarios y la incapacidad de las autoridades para resolver un problema que se arrastra durante años. La situación obedece a temas estructurales por un lado y, por otro, a la ineptitud de los empresarios navieros para mantener una relación mínimamente estable con sus operarios.
Es evidente que el fondo del problema se encuentra en el abuso por parte de los empresarios en el sistema de trabajo transitorio que permite contratar a un trabajador en la mañana y despedirlo en la tarde, generando una permanente inestabilidad así como la pérdida de cruciales derechos. A esta situación, agravada por la privatización de los puertos, se agrega el estado de los pocos trabajadores contratados que deben asumir la multiplicidad de RUT de una misma empresa, maniobra utilizada principalmente para evitar negociaciones con grande sindicatos.
Asimismo, el incumplimiento de compromisos mínimos como es el pago de las colaciones a los trabajadores por parte de los empresarios, demuestra el nivel de explotación a que se ha llegado, situación que es aprovechada ante la gran oferta de mano de obra diaria que genera la eventualidad de los contratos.
Nos declaramos absolutamente solidarios con el paro de los compañeros portuarios, con la justeza de su petitorio que abarca lo mínimo que deben cumplir los empresarios, ratificando la conciencia de que sólo la lucha permitirá a los trabajadores conquistar sus derechos.
Exigimos que el gobierno se preocupe de solucionar el conflicto y que tenga en cuenta que la economía marcha bien por el esfuerzo de los trabajadores no sólo del capital. Frente a ello nos declaramos en alerta y no permitiremos que los trabajadores portuarios sean avasallados.
Manuel Muñoz Barrientos
Presidente