2.000 puestos de trabajo menos. Es el efecto directo que ha dejado la Ley Longueira desde su aprobación el 2012. El presidente de la Federación de Trabajadores Pesqueros (Fetrapes), Juan Montenegro, calificó la normativa de «ilegítima» y criticó que «entrega privilegios a la gran industria pesquera».
Montenegro también subrayó que “los señores de Asipes y Sonapesca se han dedicado al terrorismo mediático, hablan de conspiraciones y de despidos si se revisa o anula la ley».
El dirigente valoró que los Senadores Carolina Goic, Adriana Muñoz y Rabindranath Quinteros, se atrevan a modificar la ley de Pesca y a alzar la voz , pero agregó que espera el Gobierno “rompa su silencio cómplice y se sume a la moción a la brevedad, para que los recursos pesqueros sean de todos los chilenos y el Estado recaude lo justo, terminando con los privilegios de las 7 familias”.
El presidente de la Fetrapes destacó también la necesidad de “incorporar una plataforma social que impida que el trabajador pesquero continúe siendo un temporero del mar”.