Pese a que la palabra ‘cambio’ fue uno de los ejes discursivos que usó la derecha para llegar a La Moneda, la postura dura del Gobierno y su apuesta por volver a los cauces políticos de la transición evidencian el desgaste de un viejo establishment político. El ministro Bulnes insiste en que los estudiantes bajen las movilizaciones y este jueves 29, en las calles, Carabineros reprimió duramente a los estudiantes y en la noche allanaron un hogar de estudiantes mapuches en Temuco. En frente tienen un movimiento juvenil con un apoyo inédito en la historia de Chile que está mostrando a la ciudadanía otras formas de hacer política, más horizontal y con mayor arraigo en la ciudadanía de base.
La desconfianza de los estudiantes se basa en hechos concretos: Pese a que en conversaciones previas con el ministro Felipe Bulnes, éste aseguró que el diálogo se daría sin condiciones por parte del Ejecutivo y nunca ofreció acceso a la ley de presupuesto antes de que esta ingresara al Congreso. La postura del Ministro de exigir que dejaran las tomas, no hicieran más marchas y volvieran a clases, dan cuenta de la incomprensión del Gobierno sobre un movimiento que se debe a sus bases y no a las formas de hacer política tradicionales.
“Lamentablemente, al iniciar las conversaciones nos encontramos con varias trabas” -manifestó escuetamente Camila Vallejo, minutos después de salir de la reunión que sostuvieron dirigentes de la Confech por alredeor de 180 minutos, desde las 17 horas del jueves, con el titular de la cartera de Educación.
Se suman las declaraciones de Bulnes de que no recalendizaría el año académico, lo que mantiene el próximo 7 de octubre como fecha límite para el cierre del primer semestre.
La estrategia de las vocerías del Ejecutivo a lo largo del conflicto ha sido instalarse como dialogantes, acusar a los estudiantes de intransigentes y dilatar la entrega de respuestas a los petitorios estudiantiles. Así, la primera frase que dice Chadiwck, como portavoz de Piñera, en cada punto de prensa es: «Nuestra disposición al diálogo», vemos al ministro de Educación repitiendo que los estudiantes son ‘intransigentes’, aunque tuvieron que pasar casi cinco meses para que por fin el presidente Piñera recibiera a los dirigentes estudiantiles.
VOLVER AL COLEGIO
Ante la insistencia del Gobierno de regresar a clases, Giorgio Jackson, presidente de la Feuc, sostuvo que esto será posible solo como consecuencia del avance de las conversaciones. Para ello resulta imprescindible revisar el proyecto de ley de Presupuesto 2012, el que visibilizaría la voluntad real del Gobierno de responder a las demandas estudiantiles, y por ello se dieron las tensiones principales en esa reunión.
“Nosotros esperamos que después de haber visto esta Ley de Presupuesto podamos ver cómo el Gobierno va a llevar a cabo uno de los compromisos firmados por el Estado chileno que tiene que ver con el Tratado Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que en su artículo 13, letra C, dice que la educación superior va a tender progresivamente a ser gratuita», sostuvo el dirigente de la Feuc.
Incluso el vocero, Hernán Chadwick, dijo a los medios de prensa que pedir conocer el presupuesto obedece a un “impulso juvenil”, bajando el perfil de los y las representantes estudiantiles.
La noche de este jueves el Gobierno hizo una cadena nacional donde publicitó el presupuesto para el 2011. Para educación se proponen gastar 11 mil 650 millones de dólares, lo que implica un crecimiento de un 7,2%, significando un 25% del crecimiento total del gasto público. Piñera declaró que se trata de la partida “más grande de la historia”.
SONRISAS A LA TELE Y PALOS POR ABAJO
El abrupto fin de la marcha de este jueves 29 de septiembre fue uno más de la larga lista de manifestaciones públicas asaltadas por parte de Carabineros al momento de expirar el plazo dado por la Intendencia. Aunque esta vez, las lacrimógenas llenaron el sector del Parque O’Higgins a las 11:30 horas, y el plazo acordado era hasta las 14 horas.
La falta de un escenario que señalara el fin del recorrido en la Facultad de Ingeniería de la Chile, por un lado, y la inoperancia de las fuerzas policiales por el otro, condujo a que se siguiera marchando y se desatara la batalla entre los sectores más radicales y la policía uniformada horas antes del cierre estipulado en el permiso.
En horas de la tarde, mientras los dirigentes estudiantiles conversaban con el ministro Bulnes, a pocas cuadras, la policía volvía a vaciar kilos de lacrimógenas en el Instituto Nacional y en otros liceos de la capital.
“Tu pelo tiene fragancia a lacrimógena, tus fluidos sabor a agua de guanaco, tus ojos son color barricada y tu aura es subversiva” -se leyó en una cuenta de twitter de un escolar en horas de la noche, dando cuenta de la sofocante jornada.
REPRESIÓN A HOGAR MAPUCHE
Pero el brazo policial del Gobierno de Piñera no se iría a dormir temprano. En horas de la noche, el hogar mapuche Pelontuwe de Temuco fue allanado por carabineros sin orden judicial y usando balas, según denunció el dirigente de la Federación de Estudiantes Mapuches (Femae), José Ankalao.
En un comunicado difundido por los estudiantes se acusan “grandes destrozos al interior del inmueble (puertas, ventanas, muebles). Dejando daños de gran envergadura, a un Hogar de estudiantes mapuches de escasos recursos, donde nadie se hace cargo de los daños realizados”.
Un estudiante mapuche resultó herido por el impacto de una bomba lacrimógena en su cráneo y hay varios arrestados. También la policía se llevó computadores, pendrives, CDs, cámaras fotográficas y otros aparatos usados en sus estudios, sin dejarles ningún documento a cambio como comprobante.
APOYO ROTUNDO DE LA POBLACIÓN
El 89% de respaldo a las demandas estudiantiles por parte de la ciudadanía, según constató la última encuesta Cerc, refleja una preocupación de una ciudadanía superior a la de quienes concurren habiltualmente a las urnas, es un apoyo que cruza posiciones políticas, origen socioeconómico y rangos etáreos.
Apenas un 17% de los encuestados acepta que las universidades tengan utilidades.
Un 71% de los encuestados apoya un plebiscito para destrabar el conflicto, lo que demuestra que amplios porcentajes de la población desconfían de la voluntad del Gobierno, el Congreso y los partidos políticos en darle una salida al tema.
EL VERDADERO CAMBIO
El movimiento estudiantil también está despojando a la derecha de la frase con la que derrotó a la Concertación: el Cambio. Si hace unos años la frase era un eslogan publicitario, a la hora de hacer políticas públicas se expresa en una reforma educacional de la que ya nadie se acuerda -hecha por un ministro ya olvidado- o montar espectáculos publicitarios a partir de tragedias, como la de los mineros atrapados, los estudiantes vinieron a dar el gran giro a la política chilena en las últimas décadas.
Más allá de las demandas por una educación pública y de calidad, tal como lo expresó Francisco Figueroa, vicepresidente de la Fech, es la forma de hacer política de este movimiento lo que resulta más revolucionario.
Ya no se trata sólo de transparentar el presupuesto 2012 para enterarnos de qué dineros se asignarán en el área educacional, sino que la exigencia de los estudiantes es una crítica a la lógica cupular y a la toma de decisiones de espaldas a las bases sociales que ha caracterizado la gestión de todos los gobiernos desde la dictadura.
“Lo que hoy está en juego no es sólo la consecución de nuestras demandas sino el surgimiento de una nueva manera de hacer las cosas que permite que la gente pueda decidir sobre el proceso y no sobre hechos consumados” -señaló Figueroa.
TRANSPARENCIA REAL
Esta misma horizontalidad y preponderancia de la voz de las bases motivó que los jóvenes pidieran la transmisión o bien la grabación de las reuniones con el Gobierno, además de elaborar actas públicas.
“La primera reunión con el Presidente fue grabada. Ellos mismos grabaron. Esperamos que pase lo mismo en los espacios de discusión porque no queremos dialogar a espaldas de la ciudadanía. En este primer acercamiento no va a haber grabación, pero esperamos que para las próximas citas esto sí sea posible. Hay estudiantes que también pidieron que estos encuentros fueran transmitidos por algún medio, además de las actas públicas” – dijo Laura Palma, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de La Serena (FEULS).
Como el Ejecutivo se ha negado a esa posibilidad, Figueroa aseguró que “se ha elaborado un cronograma para que luego de cada reunión con el Gobierno, la discusión pueda ser bajada a las asambleas de cada universidad y que desde allí emanen las directrices para los pasos a seguir”.
En reiteradas ocasiones el Gobierno ha dicho que los estudiantes quieren el todo o nada, pero lo que está detrás de esta llamada intransigencia, según Aquiles Hernández, vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Católica de Valparaíso (FEPUCV), es el afán de “romper con la manera cerrada de hacer política, cruzada por el tráfico de influencias de empresarios que deja fuera el parecer del pueblo, por medio de una construcción colectiva de compañeros y compañeras en asambleas abiertas”. En el pleno, como en la calle, todos somos idénticos, explicó Hernández, y “en esta relación horizontal la política viene desde las bases”.
“No querer revelar el presupuesto ante los estudiantes, es no mostrárselo a la ciudadanía, es un ejemplo más de que el Gobierno se esconde ante un pueblo que exige democracia”, concluyó el representante de la Fepucv.
Este tipo de discurso, que al menos desde la racionalidad asumen los y las estudiantes, es un método que aparece como poco pragmático ante la forma de hacer política que ha predominado nuestra historia republicana, y por lo mismo, hay una incapacidad del Ejecutivo para asimilarlo. No se trata de dirigentes, sino de representantes con quienes dialoga el Ministro, por lo cual se deben a las decisiones de quienes los escogen, y eso, según parece, no han sido capaces de entenderlo en La Moneda.
LA CEGUERA ANTE LA CRISIS
La parálisis del Gobierno y el apoyo de la población a los estudiantes en desmedro de las instituciones políticas dan cuenta de una crisis de gobernabilidad profunda que arrastra una democracia debilitada y suma cuestionamientos al sistema económico, en un mundo que crece en exigibilidad de sus derechos.
Si el año pasado los índices de ‘preocupación ciudadana’ eran dados por los medios, manteniendo en un tope por años la delincuencia, las protestas estudiantiles volvieron a los chilenos a mirar problemas de fondo. Uno de ellos, la educación, que es para el 73% de los encuestados por Cerc el principal problema del país.
Este sábado habrá reunión de la Confech en Curicó. Para el próximo miércoles 5 de octubre está programada la primera mesa de trabajo entre estudiantes y el Mineduc; el tema a tratar es la gratuidad en la educación. Para un día después está programada una nueva marcha de los estudiantes. ¿Seguirá el Gobierno creyendo que está ante una protesta espontánea?
Por Mauricio Becerra y Paula Figari Rojas
@kalidoscop
El Ciudadano