Desde el Senado ya se despachó el proyecto de ley sobre plebiscitos comunales, el cual, el 29 de noviembre, tuvo el carácter de urgente. Esta nueva legislación pone dificultades para que la ciudadanía llame a plebiscitar temas que afectan a las comunas.
Desde julio de este año entró en vigencia la ley 20.500 sobre Participación Ciudadana en la Gestión Pública; el porcentaje para convocar un plebiscito correspondía al 5% de los votantes en la comuna. La nueva legislación propone subir esta cifra a 10%, lo cual significaría que se duplicaría y en algunos casos, triplicaría la cantidad de firmas ciudadanas para poder llamar a votaciones.
La comisión del Senado que tenía que discutir en torno a esta ley fue la de Descentralización y Regionalización. Hosain Sabag Castillo (Democracia Cristiana, DC), integrante de la comisión, expresó que el aumento del porcentaje es para evitar que se plebiscite una situación que “a cualquiera se le ocurra”. “El número de vecinos debe ser prudente para un plebiscito, no para una asamblea ciudadana”, dijo Sabag.
Lautaro Guanca, concejal de Peñalolén por el partido Igualdad, y dirigente del Consejo de Movimientos Sociales de Peñalolén, en conjunto con los vecinos de su comuna, fueron la primera y tal vez única agrupación ciudadana que logró invitar a un plebiscito con la vara del 5%. Ellos lograron, luego de diferentes movilizaciones, convocar una votación para aceptar o rechazar el Plan Regulador de la comuna, el cual según Guanca es “pro lucro inmobiliario”.
Respecto a la legislación que se está discutiendo en el parlamento, el dirigente expresó que es una nueva “barrera para la democracia”, porque ya existe una dificultad, la cual es el costo de la notificación de las firmas. “Esto nos aleja más la meta máxima que tenemos para el mundo popular, el cual es una nueva Constitución”, dijo Guanca.
El concejal es claro en que esta maniobra tiene como fin asegurar la autoridad de los partidos políticos tradicionales, “la soberanía ciudadana puede dejar damnificada a la clase política, la cual carece de representación hoy en día, por eso se está haciendo esto. El poder popular es un riesgo para ellos”.
UN VOTO QUE SIGNIFIQUE UN MANDATO REAL
Otra legislación que tuvo el carácter de urgente y tiene directa relación con los plebiscitos comunales es la del Voto voluntario e inscripción automática. ¿Cómo se enlazan?
Actualmente, para que un plebiscito comunal sea vinculante necesita que por lo menos vote en él el 50% de la población electoral. Según el segundo informe de la comisión del Senado, boletín Nº 7.308-06, será vinculante siempre que vote en él “más de un 40% del total de electores habilitados para votar en la última elección de alcalde”.
Con la nueva ley de inscripción automática el universo de los votantes crecerá considerablemente, lo cual podría disminuir la posibilidad de que se pueda generar efectivamente poder ciudadano. (Ver Anexo 1).
Marcos Espinoza, diputado del partido Radical Social Demócrata (PRSD) manifestó que al aumentar en cuatro millones el número de personas también se aumentó el estatus de firmas para los plebiscitos comunales; por poner un ejemplo, “en Talca se aumentaría en un 3,5%. Eso claramente entorpece la acción ciudadana de solicitar plebiscito. Es necesario que se quedé el 5% y que sólo se pida esa referencia a las personas que votaron en las últimas elecciones”, indicó Espinoza.
El senador José Antonio Gómez (PRS), es uno de los parlamentarios que envió indicaciones para que se mantenga el 5%, tomando en cuenta los últimos votantes de las elecciones de alcaldes. Esto bajaría en parte la cantidad de votos necesarios para hacer una propuesta ciudadana vinculante. (Ver anexo 2).
Respecto al voto voluntario, el diputado Espinoza explicó que en ninguno de los artículos de fondo se indica que el Estado “pueda impartir clases de educación cívica a la comunidad”, además del aumento del volumen de gente, los nuevos votantes tienen que tener “clara conciencia del acto ciudadano del voto”. Es necesario que toda la gente entienda a cabalidad todas las funciones de poder. Espinoza explicó que hay gente que, por ejemplo, no sabe de la existencia del cargo de consejero regional.
Edgardo Condeza, presidente del Movimiento por la Consulta y los Derechos Ciudadanos, dijo que está de acuerdo con la inscripción automática porque da más facilidad a votar. “Tenemos que ejercer nuestros deberes ciudadanos, es nuestra responsabilidad elegir a nuestros representantes públicos”, expresó.
Para Condeza, sufragar es una “concesión humanista” que beneficia a la humanidad. En cuanto al plebiscito, Condeza afirmó que apunta a que se avance con esta herramienta de manera provincial, regional y nacional.
Hoy, con la capacidad de movilización que tiene el país, existen diversos temas que se exigen plebiscitar no sólo a nivel comunal sino que nacional, un caso candente es el de la educación y otro emblemático el de Hidroaysen. Hay un gran camino por recorrer.
Por Estefani Carrasco Rivera
Foto: Claudio Cáceres
El Ciudadano