El 12 de febrero pasado, la Comunidad Agrícola de ascendencia indígena Los Huascoaltinos fue notificada de que su petición fue declarada admisible por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Con esto, esta instancia internacional reconoce que el Estado de Chile incurrió en presuntas violaciones a los derechos consagrados en la Convención Americana de Derechos Humanos al aprobar el proyecto minero Pascua Lama, de la trasnacional minera canadiense Barrick Gold.
El caso fue presentado a la CIDH en junio de 2007 por la abogada Nancy Yáñez en representación de los Huascoaltinos. Sin embargo, el análisis de los argumentos de fondo fue retrasado por las reiteradas prórrogas solicitadas por el Estado de Chile, quien además solicitó que el caso no fuera admitido a tramitación, argumentando fallas formales de presentación.
Hoy, luego de 3 años de estudio de los antecedentes, no se da razón a los argumentos presentados por el Estado de Chile y se declaró admisible el alegato, que establece que existió una denegación de justicia cuando el Estado de Chile le otorgó la calificación ambiental favorable al desarrollo del Proyecto Minero Pascua Lama y sus modificaciones en los territorios ancestrales, sin tomar en cuenta la opinión de la Comunidad en ninguno de sus mecanismos formales.
A partir de la notificación de admisibilidad del caso en la CIDH -que funciona en Washington- la Comunidad tiene un plazo de tres meses para presentar antecedentes adicionales. Estos serán revisados por la Comisión, quien deberá emitir un informe de recomendaciones obligatorias para Chile, para ser cumplidas dentro de plazos previamente establecidos. En caso que el Estado de Chile no cumpliese con dichas recomendaciones, el caso pasaría a ser revisado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
«Este espacio que se abre en el terreno del derecho internacional nos llena de esperanza y nos invita a seguir en la defensa de nuestro territorio en un momento crucial, donde los peligros de Pascua Lama y los planes de Barrick Gold para nuestras tierras se hacen inminentes», señalaron representantes de la Comunidad.
El 16 de noviembre pasado el Segundo Juzgado de Letras de Vallenar dictó sentencia favorable a Barrick permitiéndole realizar prospecciones mineras en 215,77 hectáreas de nuestras tierras, ubicadas en la Quebrada de Pachuy. Con estos estudios, la empresa minera busca nuevas vetas para ampliar su proyecto Pascua Lama.
Dirigentes comunitarios explicaron que: «Estos proyectos amenazan nuestra integridad territorial y cultural y se contraponen a los planes que tenemos para nuestro propio desarrollo. Desde el año 2006, estamos trabajando para transformar nuestro territorio en una Reserva Natural y Cultural. Con esto, queremos optar por una forma de desarrollo sustentable que nos permita seguir existiendo en la relación de armonía con la naturaleza en que hemos estado siempre, y al mismo tiempo, proteger las valiosas reservas de agua cordilleranas que guarda nuestro territorio, y que dan vida a todo el Valle del Huasco. Sin embargo, todos estos anhelos se ven frustrados cuando, a pesar que los Diaguitas Huascoaltinos hemos decidido negar la entrada a Barrick, el Estado de Chile nuevamente nos obliga a dejar que se apropien de nuestras tierras al aprobar servidumbres mineras dentro de nuestra Reserva».
Sobre esto, Sergio Campusano V., Presidente de la Comunidad Agrícola Diaguita Los Huascoaltinos explica: «Esta tierra comunitaria la recibimos por herencia de nuestros mayores y queremos tener la posibilidad de que nuestros hijos y nietos puedan disfrutarla. No es justo que vengan otros a decidir qué quieren hacer con nuestras tierras, a hacer negocios y a explotarlas poniendo en riesgo el agua y la naturaleza que ha habitado con nosotros en el Huasco Alto desde siempre. Nosotros no queremos explotarlo, queremos cuidarlo y aquí no se ha respetado nuestro derecho básico a decidir qué es lo que queremos para nuestro propio desarrollo».
En este escenario de amenaza sobre una sforma de vida y sus proyecciones futuras, la admisibilidad del caso en la Comisión Interamericana abre una ventana y es un nuevo hito en el camino de defensa del Huasco Alto. “Nuestra Comunidad fue intencionalmente ignorada por El Estado de Chile durante el proceso de aprobación del proyecto Pascua-Lama, porque nos oponemos al desarrollo de la mega minería dentro de nuestras tierras y eso tiene que reconocerse y remediarse. Esperamos sinceramente que podamos encontrar en esta instancia la justicia que nos fue negada en nuestro país”, sostuvo Sergio Campusano.
Prueba concreta de que Pascua Lama está generando daños irreversibles en el entorno es que el pasado 20 de enero la COREMA Atacama inició un proceso de sanción por la afectación ilegal de glaciares y cursos de agua y por el incumplimiento de los estándares sanitarios exigidos en la Resolución de Calificación Ambiental.
El Ciudadano