Profesores quieren hacer historia

Profesores de historia, geografía y ciencias sociales entregaron una carta en La Moneda para manifestar su descontento con la disminución del 25% de las horas de clase destinadas a esa disciplina. A la movilización llegaron cerca de dos mil personas entre estudiantes y profesores, quienes fueron “dispersados” por Carabineros.

“Desacertada y lamentable”  consideraron los profesores de historia y geografía la medida que implementará el ministro de Educación, Joaquín Lavín, de reducir las horas de su cátedra en la educación básica y media. Así lo explica el comunicado por el cual llamaron a la movilización de hoy (jueves 25). El personero de Gobierno indicó que “lenguaje y matemática son la esencia y base de la educación”, a la vez que relacionó el “avance rápido” en otros ramos de la mano de éstos.

“No sólo es débil e insuficiente la argumentación del Ministerio, sino que evidencia además el sello autoritario con que se actúa en una materia tan relevante”, señala la carta dirigada al Ministro. La misiva también califica de “antidemocrática” la medida, puesto que no fue resultado de un proceso de discusión informado y transparente con el profesorado, con sus organismos profesionales y gremiales.

La convoctoria a la protesta contra la reducción de horas logró unir en 4 días a más de 850 adhesiones de historiadores y profesores, además de estudiantes que salieron a las calles en todo el país.

Quienes participaron de la marcha desde la casa central de la Universidad de Chile hasta el Ministerio de Educación, calificaron las medidas educacionales del Gobierno como propias de tecnócratas que estructuran un sistema educacional que tendrá como resultado la formación de “mano de obra barata”.

LA VOZ DE LOS PARTICIPANTES Y LOS ‘INCIDENTES’

Carabineros utilizó su carro lanza-aguas contra la multitud que esperaba el retorno de quienes entregarían la carta en La Moneda. El motivo aparente fue mover una reja. El historiador Julio Pinto, conversó momentos antes con “las fuerzas del orden” para que una vez entregada la carta se disolviera la manifestación, pero el acuerdo no fue respetado y antes de su regreso los activistas fueron “dispersados”.

Sergio Grez, historiador y académico de la Universidad de Chile, criticó la solución estatal para mejorar la calidad de la educación, y la tildó de “meramente tecnocrática”. Grez advirtió que de seguir estas normativas educacionales, los colegios terminarán bajo la lógica del mercado como preuniversitarios, con adiestradores de técnicas para sacar buenos puntajes, en circunstancias en que las reformas del ejecutivo deberían entregar una educación más integral, más global, más crítica. “De esa forma también se podrían mejorar los puntajes”, señaló Grez.

“Tenemos un presidente que cada vez que habla, comete atrocidades en torno a la historia, entonces, si queremos para todo Chile lo mismo… hay que seguir adelante y quedarse callado”, señala enfática una profesora del Liceo de Aplicación, quien además mencionó la “preocupación” del profesorado cuando se redujeron las horas de filosofía y se eliminó de la malla curricular el idioma francés, sin “ocuparse” de ello en el momento. “Es hora de ser activos, porque esto involucra a la sociedad entera”, aseveró.

El profesor de las Universidades Arcis y Universidad de Santiago de Chile (Usach), Sebastián Leiva, consideró como una contrariedad la celebración del bicentenario (donde se narró la historia de Chile) y la disminución de horas. “Lo que se hace quitando horas de historia en la escuela, es debilitar los elementos de continuidad de la nación, frenando el proceso de transferencia profundo de una sociedad en el tiempo, y eso es grave”, señaló Leiva.

Por último, Grez  adelantó la conformación del “movimiento de defensa de la historia, la geografía y las ciencias sociales”, que entregarán documentos analíticos que permitan generar una discusión adecuada en la materia.

Por David Abrigo B.

Fotografía: UPI/Cooperativa.cl

El Ciudadano