Durante la mañana del sábado 20 de diciembre tendrá lugar a partir de las nueve de la mañana un taller de participación ciudadana sobre el impacto ambiental que conllevará el proyecto de expansión portuaria llevado a cabo por la empresa TCVAL. Esta actividad, que se realizará en el Salón Esperalda de la Intendencia, fue convocada por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), que tiene planificadas 17 participaciones ciudadanas tanto en Valparaíso como en Laguna Verde.
Los talleres de participación ciduadana consisten, principalmente, en que la empresa de Terminal de Cerros de Valparaíso (TCVAL) y su directorio dan a conocer el proyecto de ampliación del puerto de Valparaíso a la ciudadanía, para que luego ésta pueda formular consultas u observaciones al respecto.
En la última sesión efectuada el día veinte del pasado mes de noviembre, los vecinos y organizaciones ciudadanas manifestaron de forma masiva su rechado al proyecto que supondrá para Valparaíso la pérdida de su estado de ciudad Patrimonio de la Humanidad, concedido por la UNESCO. La nueva terminal dejará también sin acceso al mar a la población de Valparaíso, además de causar un fuerte impacto visual, sonoro y medioambiental que traerá consecuencias negativas para la ciudad y sus ciudadanos.
Es importante recordar que los que se oponen al nuevo plan porturario sí que quieren un nuevo puerto para Valparaíso, pero «un puerto bien hecho, con proyectos integrados que tengan en consideración a la ciudadanía, así como el desarrollo sostenible y económico de Valparaíso«, según declaró para este mismo medio Tomás Elizalde, portavoz del movimiento ‘Mar para Valparaíso’.
La licitación para llevar a cabo la construcción de la nueva terminal de buques fue entregada en 2013 a la empresa española OHL, que a su vez creó la empresa Terminal de Cerros de Valparíso para llevar a cabo todo el proyecto, empresa conocida por sus siglas TCVAL.
El proyecto para la ampliación del puerto ha suscitado mucha controversia debido a las irregularidades que lo han rodeado desde su licitación. El nuevo plan portuario creará un muelle de 725 metros de longitud que se construirá ganando terreno al mar adelantando la línea de costa unos 180 metros. Esta ampliación requiere el uso como cantera de 52 hectáreas de la Laguna Verde para extraer el material de relleno para la nueva plataforma, lo que supondría una gran amenaza para una zona rica en flora y fauna.
Por todo ello, la ciudadanía de Valparaíso esta dispuesta a seguir luchando y mostrando su oposición a «un proyecto de mala calidad que carece de un estudio técnico eficiente, que tiene muchas externalidades negativas, que no fue considerado por ningún tipo de participación ciudadana, y que aisló por completo a la ciudad de Valparaíso del proyecto“, sentenció Tomás Elizalde.