Este lunes la aerolínea Latam, fusión entre la chilena LAN y la brasileña TAM, se sumó al boicot que varias compañías aéreas llevan a cabo contra el país latinoamericano y el Gobierno de Nicolás Maduro, tras anunciar la la suspensión “temporal e indefinida” de sus rutas.
La panameña Copa y la colombiana Avianca siguen conectando Caracas con otros destinos latinoamericanos, pero con frecuencias y equipos reducidos.
El primer transportista aéreo de importancia en la región informó que el motivo de la cancelación es “el complejo escenario macroeconómico que atraviesa el país».
El aviso de suspensión tiene efecto inmediato para la ruta entre São Paulo y Caracas, mientras otros destinos, como Lima y Santiago, dejarán de ser servidos a finales de julio.
El anuncio siguió a una notificación similar el viernes por parte de la aerolínea alemana Lufthansa, y otras empresas como Air Canada, Alitalia y Tiara Air (Aruba).