Afganistán: un proceso de paz sin mujeres no funcionará

A pesar de que los derechos de las mujeres ha sido un asunto central en los discursos sobre la privación de libertad y violación de derechos en Afganistán, las mujeres no tienen sus asientos asegurados en la mesa de negociaciones de paz.

Por parte de EEUU, se ha declarado varias veces que los derechos de las mujeres es un componente vital en Afganistán. Muchas mujeres afganas opinan que la comunidad internacional ha dejado la lucha por las libertades de las mujeres en el país.

«Hay una falta de compromiso de la comunidad internacional. Al inicio de la guerra se habló de la importancia de las mujeres afganas y sus derechos. Todos los avances que hemos logrado son muy frágiles. Podemos perderlos fácilmente sin su apoyo,” señaló la legisladora del parlamento afgano, Farkhunda Zahra Naderi, según un reporte emitido por Oxfam. “Ahora dejan todo a Afganistán y dicen que las afganas pueden defender sus derechos. Ayer eran audaces en sus declaraciones, pero hoy en día son callados.”

La participación de las mujeres en el proceso de paz es altamente necesario debido a la obviedad de los hechos: son más de la mitad de la población. Más allá, la participación de las mujeres en las negociaciones de paz se ha mostrado especialmente exitosa en casos anteriores.

Farkhunda Zahra Naderi

Un ejemplo notable, es la participación de las mujeres en El Salvador durante los años 90, donde las mujeres estuvieron presentes en casi todas las sesiones de negociación de paz. Similarmente, las negociaciones de paz en Guatemala vieron la representación y participación de las mujeres, donde ellas lograron influir significativamente, aunque solo habían dos representantes de sexo femenino. El acuerdo de paz que se logró contenía varias cláusulas importantes sobre la igualdad de género.

“Los estados son particularmente vulnerables cuando un gran número de personas que viven dentro de sus fronteras están desconectados de las instituciones del Estado, y cuando estas sólo son responsables ante una minoría de élite,” destaca la ONU en un reporte sobre la participación y el rol de las mujeres en el proceso de paz.

Esto es justamente a lo que se enfrenta las negociaciones afganas, donde las mujeres podrían ver su acceso a las conversaciones limitado. Esto también podría resultar en un empeoramiento de los derechos de las mujeres, algo que se ha logrado mejorar durante los últimos trece años, como las discusiones entre las partes del conflicto muchas veces es el lugar donde se dibuja el futuro del país y no solo “desde ahora vamos a bajar las armas”.

Durante el proceso de paz afgano, las mujeres han estado presentes, sin embargo, su participación no está asegurada.

Cuando el nuevo presidente afgano asumió el poder el año pasado, no señaló claramente si las mujeres iban a tener espacio en las negociaciones con los talibanes. La organización Oxfam advierte que un bloqueo de las mujeres en las negociaciones, podría tener efectos graves para la paz en el futuro.

“La exclusión de las mujeres resultará en una paz imperfecta y no sustentable. La evidencia muestra que cuando las mujeres son incluidas en el proceso de paz, las posibilidades de un fin a la violencia aumentan en un 24%,” destacó la ONG. “La paz no puede ser asegurada si que más de la mitad de la población sea excluida de la mesa y no se puede mantener [la paz] sin mujeres en su núcleo.”

Según el reporte, muchas mujeres afganas están preocupadas de que sus derechos serán privados durante las negociaciones con los talibanes, dado esto, hay que dar prioridad a estos temas durante todo el proceso y asegurar la representación de las mujeres. La organización recomienda una cuota de 30% de mujeres en todas las instancias donde se negociará la paz.

En los últimos años, el estado de los derechos de las mujeres no es algo únicamente positivo en el país, varias influencias y poderes tanto políticos como religiosos todavía no reconocen las libertades de las mujeres como algo intrínseco.

En un debate parlamentario en el 2013, varios de los diputados señalaron que tanto los matrimonios forzados como los matrimonios de menores de edad no deberían ser ser ilegal, y que los refugios de las mujeres no deben existir en el país. También expresaron que las mujeres afganas deben ser obligadas de obtener un permiso de su esposo para realizar trabajos.