Argentina y Gran Bretaña vuelven a enfrentarse por un asunto sobre el que se ha polemizado desde 1982: la soberanía de las islas Malvinas, también conocidas como Falklands. El gobierno argentino convocó este jueves a John Freeman, el embajador británico en Buenos Aires, para exigirle explicaciones sobre un supuesto espionaje masivo a ciudadanos y autoridades argentinas ordenado por Gran Bretaña.
La información acerca del espionaje fue publicada en unos de los documentos filtrados por Edward Snowden, el ex trabajador de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense. Según estos documentos, los servicios de inteligencia británicos prepararon y ejecutaron durante años la ‘Operación Quito’, basada en una red de espionaje que tenía como objetivo recabar información sobre los movimientos argentinos en relación a las islas Malvinas.
El gobierno de Argentina declaró que, si estos documentos fueran ciertos, Reino Unido habría incurrido en la violación del «derecho a la privacidad establecido en las resoluciones 68/167 y 69/166 de la Asamblea General de las Naciones Unidas«.
El gobierno de Reino Unido, no se ha pronunciado por el momento sobre la veracidad o falsedad de los documentos filtrados por Snowden, pero se mostró molesto por las críticas argentinas ante el aumento de la presencia militar de Reino Unido en las Malvinas. El ejecutivo argentino declaró que este incremento en defensa se había producido con fines electoralistas y definió tal acción como una maniobra injustificada.
El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, declaró públicamente el pasado mes de marzo que Reino Unido reforzaría su presencia militar en las islas: «Hoy anunciaré en el Parlamento que vamos a reforzar allá nuestra capacidad de defensa y amparar el derecho de los isleños a ser británicos«.
El aumento de la defensa de las islas se justificó con una supuesta amenaza argentina sobre la soberanía de los territorios isleños, pues Fallon destacó que a pesar del tiempo que había pasado, «la amenaza -de Argentina- no se ha reducido«.
El conflicto por las islas Malvinas, Falkland, tuvo lugar en 1982 durante más de 70 días de combates que acabaron con la vida de cientos de personas, y con la victoria de la corona británica que asumió la soberanía sobre este territorio situado a más de 12 mil kilómetros de las costas de Reino Unido.