Birmania deja atrás décadas de dictadura y abre diálogo

fuente: buendiario.com

Se ha abierto un canal de diálogo sin precedentes en el país asiático, una clara señal de apertura luego de décadas de regimen dictatorial. El presidente, ex comandante Thein Sein, recibió a Aung San Suu Kyi -principal dirigente opositora- y a otros representantes políticos adversos, con el fin de abrir el camino a elecciones inclusivas el año entrante. Thein Sein y Aung San Suu Kyi ingresaron juntos a su primera reunión juntos, una constancia pública de que hay intenciones de poner fin al sostenido gobierno militar.

La reunión se dio en la capital de Birmania (también conocida como Birmania, y previamente llamada Burma), Naypyidaw. La fecha estipulada para las elecciones será entre la última semana de Octubre y la primera de Noviembre de 2015. La última elección en el país fue en 2010, pero la credibilidad de la misma se opacó por sostenidas denuncias de manipulación de los votos por parte de Aung San Suu Kyi y su partido, la Liga Nacional para la Democracia (NLD). Por otra parte, la dirigente opositora fue encerrada por el gobierno durante dicha elección y así permaneció varios días luego del voto

Birmania demuestra ahora una voluntad de libertad política y de diversidad, apuntando a un período de apertura y paz. De hecho, se cree que el NLD tiene ahora muchas chances de tener mayoría en la legislatura y que su líder puede convertirse en primer ministro del país por primera vez. Aung San Suu Kyi, de 69 años, es una activista de larga data por la democracia y que ha sido encarcelada sendas veces por cuestionar al gobierno militar.

La promesa de la elección de 2015 es la de absoluta libertad por primera vez en la historia del país. Quizás sea el primer gobierno civil en años. Thein Sein sorprendió a la comunidad internacional con esta y otras decisiones democráticas, que dan la idea de una reforma: se han eliminado sanciones y se han liberado a prisioneros políticos; se ha puesto fin a varios frentes de guerras civiles y se ha abierto el diálogo con minorías étnicas. Su sistema legal aún es opaco y el nivel de pobreza es alto, pero hay claras señas de apertura y deseo de democracia.