Bomberos pirómanos y doble estándar: la discriminación del gobierno al Pueblo Mapuche

Uno de los conflictos que más publicidad ha habido en medios empresariales con respecto a las reclamaciones por tierras ancestrales es con el latifundista René Urban, ligado a sectores ultras de la derecha chilena. En diversas ocasiones se ha acusado abiertamente a personas ligadas a las reivindicaciones de tierras ancestrales del Pueblo Mapuche, sin embargo, recientemente, han sido detenidos bomberos a quienes se les acusa de cometer ataques incendiarios al interior de sus fundos y que según se ha señalado, estarían confesos.

Es importante señalar que desde hace rato ya, las operaciones políticas y el efecto mediático gatillado desde el Gobierno, ciertos empresarios y latifundistas neocolinialistas, han puesto irresponsablemente en el banquillo de los acusados a “Mapuches” y sus consecuencias han sido generalizadas. Paralelamente, estas posiciones han sido retroalimentadas y reafirmadas por ciertos medios informativos hiperideologizados acostumbrados a violar los derechos humanos.

El diario digital clave9.cl publicaba este 15 de marzo sobre la detención de los bomberos y señalaba: “Se trata voluntarios, quienes según el Ministerio Público, actuaron por enemistad contra la familia Urban, según confesaron. El sábado 16 de marzo se realizará su control de detención…”

El Ministerio Público informó que confesos se encuentran cuatro voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Ercilla, quienes fueron detenidos esta tarde por su responsabilidad en dos incendios que afectaron a predios de la familia Urban, en la comuna de Ercilla.

El fiscal adjunto de Collipulli, José Traipe, explicó que los delitos ocurrieron en el fundo “La Cruzada”, ubicado a la altura del Km. 585 de la ruta 5 Sur, durante los meses de enero y febrero y dicho medio difundía: “El persecutor precisó que los imputados -dos hombres y dos mujeres- todos voluntarios de Bomberos de la comuna ciasde Ercilla, prestaron declaración voluntaria hoy en el cuartel de la PDI, oportunidad en la que confesaron su participación en los hechos…” Agregaron: “Reconocieron ser voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Ercilla y que en virtud de estos hechos habían realizado algunas concurren a incendios que se habían cometido en perjuicio de la familia Urban. En ese contexto se generó una enemistad de parte de estas personas hacia la familia, que los llevó a concurrir en dos ocasiones distintas hasta un predio ubicado en la comuna de Ercilla, de propiedad de los Urban, para prender fuego en el mes de enero en una siembra de trigo y en el mes de febrero a rastrojos que quedaron en el lugar”, señaló Traipe.

Ante estos hechos, que se enmarcaron dentro de la llamada “Zona roja” y ampliamente publicitada como parte del denominado conflicto Mapuche por parte de funcionarios políticos públicos, hubo prácticamente silencio y omisión.

Cabe mencionar que por años los órganos pertinentes de fiscalización y justicia se han dedicado a la persecución y criminalización de personas Mapuche en el marco de reivindicaciones de tierras o defensa de territorios, de hecho, quienes están a cargo de las investigaciones hay fiscales de amplia trayectoria y reconocimiento judicial en este sentido, con sendos allanamientos a comunidades, uso abusivo y arbitrario de fuerzas públicas, escuchas telefónicas incluyendo a abogados defensores, entre numerosas otras acciones de persecución.

Ante incendios intencionales de cualquier índole, ciertos personeros públicos, has establecido imputaciones a causas y móviles sin que exista probidad por quienes están llevando las investigaciones, sin que se establezcan las verdaderas conexiones que hay detrás de los llamados incendios “terroristas”, existiendo mantos turbios sobre verdaderas autorías, ya que por una parte se busca a incriminar a personas mapuche que están activos en la recuperación de tierras y por otro lado, ha habido sendas acusaciones a grupos ligados a empresas forestales o sectores ultras. Ahora, hasta jóvenes bomberos aparecen dentro de estos actores.

Los incendios forestales de enero del 2012

La situación de montajes y acusaciones no es nueva. En enero del 2012 una seguidilla de incendios se suscitó entre el Bio Bio y la Araucanía y que terminó la escalada con la muerte de brigadistas de la empresa forestal Mininco en Carahue, y desde el propio Presidente de la república manifestóa la prensa: “En lo que se refiere a los incendios en tanto en Maule, Biobío y la Araucanía tenemos información confiable que nos hace presumir que detrás de estos incendios ha habido una intencionalidad criminal y creemos que debemos combatir los incendios y los criminales que presuntamente están detrás de estos incendios», afirmó, generalizando las “intencionalidades”.

Inmediatamente apareció el ex ministro del interior, Rodrigo Hinzpeter, amigo personal del Presidente, quien vinculó los incendios a la Coordinadora Arauco Malleco, basado en un ataque incendiario a un helicóptero ocurrido poco antes. “Hace pocos días en esta misma región, un helicóptero que estaba destinado a apagar el fuego, fue atentado y quemado. La misma Coordinadora Arauco Malleco ha emitido un comunicado y se ha adjudicado ese atentado y que es precedido por más incendios”. Señaló además que “Muchos antecedentes me hacen pensar que aquí ha existido intencionalidad y por eso hemos invocado la Ley Anti-terrorista. La CAM se ha adjudicado un atentado destinado a apagar incendios, pocos después hemos tenido incendios. Yo no quiero hacer conjeturas, ni señalar a nadie con el dedo”, agregó.

Luego reafirmó Hinzpeter: “ El Gobierno no tiene más deber que poner estos antecedentes -que según ellos permitirían confirmar que detrás de los incendios existen organizaciones mapuche- en manos de quien corresponde, en este caso la justicia, para que a través de un fiscal y un juicio justo se establezcan las responsabilidades que correspondan”, sentenció.

Agregó en otro anunciado público: «El gobierno dispone de antecedentes que por lo demás han ido apareciendo en la prensa con bastante claridad de que tanto este incendio de Carahue (en el que murieron los siete brigadistas) como otros en la región del Bíobío, habrían sido intencionales”.

El intendente de la Araucanía, Andrés Molina, ex ejecutivo de empresas forestales, dijo a Radio Cooperativa “No se puede asegurar ni confirmar» la implicación de la organización reivindicativa mapuche, pero si se puede -hacer una relación- respecto del modo de operar y su similitud con la quema de un helicóptero que se produjo en la región la semana pasada y que reivindicó la Coordinadora Arauco Malleco”, dijo Molina.

Frente a esto, todos los sectores políticos Mapuche categóricamente negaron toda vinculación con los incendios forestales y se sostuvo que fue un nuevo intento de la Moneda por estigmatizar a las comunidades.

Cabe mencionar que los incendios forestales se concentraron mayoritariamente en plantaciones de pino, en zonas resecas a causa de la depredación provocadas por monocultivos forestales y en sectores, donde las plantaciones de pino están en miles de hectáreas con una plaga de la avispa taladrora “forestal Sirex noctilio” y que causa pérdidas a las empresas por la muerte de los pino y los incendios posibilitan cobros de seguros, no así la plaga.

Los mega incendios señalados, fueron actos criminales de lesa humanidad, que arrojaron varias víctimas humanas, pero el gobierno no tuvo tapujo para tratar de desviar la atención de sus orígenes, por el contrario, aplicó Ley antiterrorista y dejó en el aire la “causa Mapuche”. Hoy, cuando se van comprobando que hay otras autorías, guarda silencio.

Por Alfredo Seguel

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