La comisión del Senado encargado del impeachment contra la presidenta Dilma Rousseff quiere acelerar el juicio político contra la mandataria. En la reunión para aprobar el cronograma de trabajo de esta segunda etapa del proceso, la comisión buscó rebajar en unos 20 días los plazos previstos para el juicio político respecto a los tiempos establecidos por el relator del caso Antonio Anastasia.
Éste había planteado dejar 15 días para las alegaciones finales de la defensa y otros 15 para la acusación, de modo que el juicio se situaba hacia el 20 de agosto. Sin embargo, la senadora del PMDB Simone Tebet, quien comparte bancada con el presidente interino Michel Temer, presentó una acción en la que alegó que el Código del Proceso Penal establece sólo cinco días para cada una de las partes. Esa cuestión de orden fue acogida por el presidente de la Comisión Especial, el senador Raimundo Lira, también del PMDB, e impidió que en la reunión de este jueves se realizara la votación.
Debido a la controversia generada por esta moción, Lira resolvió que la palabra final sobre la modificación del lapso de exposición de los alegatos sea definida por el presidente de la Suprema Corte, Ricardo Lewandowski. «Solo después que este se pronuncie se someterá a votación el cronograma de trabajo», indicó.
Por su parte, el abogado de la presidenta Dilma Rousseff, José Eduardo Cardozo, exigió el plazo de 15 días y manifestó que ejercerá una «defensa maniatada» durante el desarrollo del impeachment que una Comisión Procesal del Senado Federal de Brasil desarrolla contra la mandataria constitucional.